La peor condena: por robar la mandaron a trabajar
Una mujer sustrajo unos gorros de lana de un local de la peatonal, pero fue descubierta. Deberá hacer tareas comunitarias.
Una mujer fue condenada en Flagrancia por hurto simple por ser sorprendida robando en un local de la peatonal. La condena fue de suspensión de juicio a prueba por el término de 1 años. Además, deberá realizar 80 horas de tareas comunitarias en el plazo de 4 meses, deberá pagar $3.000 a merenderos y tiene prohibido acercarse a 200 metros del comercio donde fue el hecho, según informó este viernes el Ministerio Público Fiscal.
Rosana Lourdes Reinuaba junto a otra mujer ingresaron a un local de ropa y accesorios ubicado en la peatonal. Una vez en el interior empezaron a mirar algunos productos, y para distraer a una vendedora le hicieron una consulta, luego Lourdes se guardó dos gorros de lana y a los pocos segundos se retiró del lugar.
La empelada se dio cuenta de la maniobra de las mujeres, e increpándolas en la vereda les pidió que devuelvan lo que habían llevado sin pagar. Un efectivo que estaba cerca se acercó y al ver esta situación ambas huyeron arrojando uno de los gorros.
Minutos más tarde en las inmediaciones de la galería comercial con salida a Avenida Ignacio de la Roza dieron con Reinualba y la detuvieron, mientras que su cómplice logró escarpar.