En una jornada que comenzó como un simple chapuzón en un canal de riego, dos hermanos de 16 y 18 años se vieron envueltos en un enfrentamiento con la Policía que culminó con su detención y el deterioro de un vehículo policial. El incidente, que tuvo lugar en las últimas horas, dejó a uno de los jóvenes condenado a pagar una reparación económica de $5.000 y realizar 60 horas de trabajo comunitario. 

Según fuentes judiciales, el episodio comenzó cuando los hermanos decidieron sumergirse en un canal de riego, desatando una cadena de eventos que los llevó a enfrentarse a las autoridades. Al percatarse de la presencia policial, los jóvenes emprendieron una fuga en un colectivo de la RedTulum. En tanto, los efectivos policiales iniciaron una persecución.

El relato judicial reveló que finalmente lograron la detención de los hermanos. Sin embargo, la situación se tornó violenta cuando uno de los adolescentes, en un acto de resistencia a la autoridad, causó daños considerables al patrullero, destrozando un espejo retrovisor y el parabrisas. El caso fue llevado a la instancia de Flagrancia, donde imputaron al mayor. 

Los cargos fueron de "daño agravado y resistencia a la autoridad en concurso real". En un juicio abreviado, el hermano mayor aceptó la suspensión de juicio a prueba por un año. Además, se determinó una reparación simbólica de $5.000 destinada a merenderos locales y la realización de tareas comunitarias durante tres meses, sumando un total de 60 horas.