Tras la condena a la odontóloga, el papá del nene dijo: “hemos logrado la justicia que queríamos”
Luego de 8 años, el padre del niño a quien le extrajeron 12 dientes habló del duro proceso que afrontaron.
A mediados de esta semana, la odontóloga María Romina Pellice fue condenada a un año de prisión condicional y a un año de inhabilitación para ejercer su profesión, tras ser encontrada culpable por la Justicia de San Juan de haber extraído 12 dientes a un niño de 5 años sin el debido consentimiento de sus padres en el año 2017. Este caso, tuvo su primer juicio en 2022, donde el juez de primera instancia, condenó a Pellice y a su asistente a 1 año y 6 meses de prisión y 3 años de inhabilitación. Sin embargo, la defensa presentó un recurso de casación, y la Corte de Justicia anuló la sentencia, ordenando un nuevo juicio. Su papá habló en Canal 13 sobre el proceso, su mirada del caso y cómo fue la recuperación del niño.
En el segundo juicio, el Ministerio Público Fiscal decidió desvincular a la asistente de la odontóloga, argumentando que no era la cirujana principal. Martín Lucero, padre del niño, expresó su desacuerdo con esta decisión. Sin embargo, la lucha no cesó. Lucero, estuvo 8 años buscando justicia: “Lo único que queríamos nosotros como familia es que se hiciera justicia. Creo que lo hemos logrado”. Añadió que este proceso ha sido extremadamente difícil, ya que tuvieron que afrontar los costos de tratamientos odontológicos, psicológicos y otros gastos derivados de la situación.
El niño, que hoy tiene 13 años, sufrió un trauma significativo a causa de la extracción de sus dientes. Lucero relató cómo su hijo, al ingresar al jardín de infantes, enfrentó burlas y dificultades para socializar debido a su falta de dientes. “Él no podía poner en palabras lo que le había pasado, no sabía explicar por qué le habían sacado los dientes. Sus compañeros se reían de él”, recordó el padre. Además, el niño tuvo que someterse a tratamientos prolongados, incluyendo el uso de prótesis, expansores y aparatos para mantener el espacio en su boca, ya que los dientes permanentes tardaron en salir. “Hoy es otro niño, ha podido sobrellevar todo esto”, afirmó Lucero.
Respecto a los gastos médicos, Lucero detalló que la familia tuvo que adaptarse a un nuevo estilo de vida: “Tuvimos que cambiar la alimentación, adaptarnos para que él no se sintiera mal o distinto”. El niño también enfrentó problemas digestivos: "Le producía desgarros al comer, no podía masticar bien, y eso le causaba diarreas y otros problemas”, explicó.
Cabe recordar que el caso se remonta a 2017, cuando los padres llevaron a su hijo al consultorio de Pellice para tratar una muela cariada que le había causado un flemón. La odontóloga recomendó realizar la extracción en un quirófano bajo sedación, pero sin informar a los padres sobre la posibilidad de extraer más dientes. “Nosotros accedimos a eso, desconociendo lo que iba a suceder después. No fuimos informados, no firmamos ningún consentimiento”, afirmó Lucero. Al salir del quirófano, las odontólogas entregaron a la madre un frasco con 12 dientes. Lucero expresó: “Esto nos va a ayudar un poquito a sanar y a poder cerrar este ciclo que fue tremendo, sobre todo para mi hijo”.