En la mañana de este sábado, la brigada de la Unidad Fiscal de Investigación CAVIG realizó un importante operativo en el que Los sujetos fueron aprehendidos gracias a un despliegue coordinado de fuerzas de seguridad que tuvo lugar en distintos puntos estratégicos de la ciudad.

La causa que está siendo investigada por los fiscales Eduardo Martínez y Roberto Ginsberg. El caso dio un giro significativo cuando las solicitudes de información a las compañías de telefonía celular revelaron que el número de IMEI del celular robado impactó con una línea de propiedad de un joven de apellido Aguilar. Los pesquisas allanaron la vivienda de Aguilar y encontraron el celular. Aguilar afirmó haber comprado el teléfono de buena fe a su cuñado, Federico Ojeda, lo cual fue corroborado por una hermana que se encontraba en el lugar.

Según la información brindada por Fiscalía, esta hermana indicó que su cuñado Federico Ojeda sería uno de los autores del hecho en la Costanera. Ante esta revelación, los investigadores realizaron una nueva serie de allanamientos y

Ojeda llegó con su amigo Héctor Aballay y los elementos robados, y , ya que estaban tratando de deshacerse de todo lo robado. Esta información llevó a los policías a Aballay, quien intentó escapar, pero fue detenido a pocas cuadras.

Los detenidos fueron trasladados a la sede central de la UFI CAVIG, donde permanecen bajo estrictas medidas de seguridad. En unos días serán llevados a la audiencia de control de detención con la jueza Guerrero. En los próximos días, se espera que se presenten formalmente los cargos en su contra y que se realicen las audiencias correspondientes para determinar su situación legal.

Con estas nuevas detenciones, las autoridades esperan avanzar significativamente en el proceso judicial y ofrecer una respuesta contundente a la gravedad del delito.