Este jueves el ministro de Producción de la provincia, Ariel Lucero, pasó por La Justa y dio definiciones en el marco de los programas Mujeres + II, Ímpetu Emprendedor y Códigos de barras. Se trata de un nuevo impulso económico y laboral para San Juan.

“Son esfuerzos de subsidios entre provincia y nación, con la finalidad que lleguen herramientas financieras competitivas al sector privado y se puedan generar las inversiones para llevar adelante una mayor producción” explicó el funcionario. La idea es aumentar los productos y servicios sanjuaninos y en definitiva el producto bruto provincial.

Mujeres + II es la segunda versión de un programa anunciado post pandemia pensando en el sector empresarial femenino, “para generar esa inserción que muchas mujeres no tienen en nuestra sociedad”.

“Esto generó una expectativa de 135 personas, se pudieron financiar 20, otros 115 quedaron sin financiamiento. Pusimos en valor esos 20 proyectos y se relanzó para el cupo que no tuvo alcance en este momento”, informó Lucero. Recibieron un créditos de hasta $250 mil, para el desarrollo de emprendimientos gastronómicos, textiles y de servicio.

Ímpetu Emprendedor tiene como objetivo principal desarrollar e implementar un conjunto de acciones destinadas a emprendedores en diferente estadio, generando capacidades empresariales, brindando conocimientos y sustentabilidad de sus empresas a través de una mayor competitividad. “Son empresas de chicos que son nuevos que comenzaron siendo tres y ahora exportan servicios a cinco países diferentes y al cabo de 18 meses dan trabajo a 50 personas”

Por último, el programa Código de Barras es una iniciativa de apoyo a productores sanjuaninos impulsando la marca distintiva y sello origen de San Juan. Hace referencia a dar posibilidad a los productores a que puedan obtener este código de barra que les permitirá ingresar a nuevos mercados.

“Hay que entender cuál es la demanda no solo de los sanjuaninos sino del mundo y con el potencial productivo satisfacer esa demanda”, dijo el ministro y completó, “hay generaciones que se van insertando al sector del consumo como los milenial y centenials que tienen un comportamiento diferente a actividades tradicionales como la viticultura”, finalizó.