AstraZeneca y el Instituto Jenner de la Universidad de Oxford, ambos del Reino Unido, frenaron este martes en Estados Unidos las pruebas de la fase 3 de la vacuna que elaboran contra el coronavirus, según lo informado por un vocero del laboratorio sueco-británico citado por el sitio especializado Stat News.

La decisión fue tomada a raíz de haberse detectado “posibles reacciones adversas” en uno de los participantes del estudio en el Reino Unido. La pausa en la investigación es para “permitir la revisión de la información” del paciente afectado.

Además, el vocero del laboratorio aclaró que esto es una acción de rutina que debe suceder cuando tiene lugar una enfermedad que potencialmente no tenga explicación durante el desarrollo de las pruebas. "Estamos trabajando para acelerar la revisión de este único evento para minimizar cualquier potencial impacto en los objetivos temporales de la prueba", explicó.

Asimismo AstraZeneca no dio detalles sobre los síntomas que tuvo la persona afectada, pero el portal de noticias especializadas Stat News dio a entender que hay sospechas de una "seria reacción adversa".  Stat News explicó que este tipo de frenos son habituales en estudios como éste y remarcó que la preocupación se ve magnificada por la acuciante necesidad de desarrollar una vacuna contra la pandemia. 

Este grupo de trabajo -AstraZeneca y Oxford- es el que acordó con el Gobierno de Argentina y México el desarrollo de la vacuna.