Tras la toma de rehenes en el canal de televisión ecuatoriano TC, se conocieron reportes de graves incidentes con hombres armados en la Universidad de Guayaquil. En redes sociales se  mostraron imágenes en las que hubo corridas en el campus y que grupos de estudiantes y docentes tuvieron que buscar refugio en las aulas a la espera de que se resuelva este incidente, aún en proceso.

El ministerio de Educación de Ecuador dispuso la modalidad ‘no presencial’ en todo el Sistema Educativo Nacional hasta el viernes 12 de enero de 2024. La Universidad de Guayaquil suspendió todas las actividades en sus instalaciones y otros centros educativos así como algunas instituciones del Estado se encuentran en alerta.

Esta situación también surge tras la presunta fuga de un capo del narcotráfico y del crimen organizado, Adolfo Macías, alias Fito y de un jefe regional de otra banda criminal, Fabricio Colón Pico, y luego de una madrugada con al menos 30 actos violentos en nueve provincias del país, con secuestros de policías y explosiones de vehículos.

La secuencia de ataques sucedió a la decisión del presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, de decretar la víspera un estado de excepción y toque de queda nocturno por 60 días tras confirmarse la desaparición de la cárcel de Fito, que aún sigue en paradero desconocido. Fito es líder de uno de los principales grupos del crimen organizado, conocido como Los Choneros, con estrechos vínculos con el cartel de Sinaloa, según las autoridades.