Un niño de 12 años, identificado como Santiago, fue interceptado y llevado por dos hombres, quienes lo amenazaron con un cuchillo cuando había salido de su casa a pasear a sus perros. Al día siguiente, el cuerpo del menor fue encontrado en la casa de los homicidas. El hecho ocurrió el 29 de abril en la comuna de Longaví, ubicada a 317 kilómetros al sur de Santiago de Chile. 

Los padres de Santiago hicieron la denuncia al instante en que los perros regresaron a su vivienda sin el chico. Minutos después, se llevó a cabo un operativo policial en toda la zona y se logró encontrar a los criminales: Gerald Repetto y Rubén Soto, dos hombres con antecedentes penales. Un equipo multidisciplinario de la Policía de Investigaciones abordó las primeras indagaciones.

El jefe de la PDI del Maule, el prefecto inspector Lautaro Arias, confirmó que el menor presentaba 'lesiones atribuibles a terceras personas'. Habría sido atacado sexualmente durante gran parte del tiempo en el que estuvo de rehén. Tras el hallazgo del cuerpo del menor, la Policía detuvo a los dos sujetos. Según ellos, 'hubo evidencias suficientes y un buen trabajo de campo'.

Tras llevar a cabo la identificación, le solicitaron al Juzgado de Garantía de Linares la orden y detuvieron a los criminales en las inmediaciones de la ciudad de Talca. Repetto ya había estado vinculado por otro crimen ocurrido el 2009. Y Rubén Soto en 2020 fue condenado a una pena de 1 año de régimen semicerrado y dos años de libertad asistida por la violación a una menor.