A sus 96 años y con más de 7 décadas como soberana de Reino Unido falleció Isabel II, su legado histórico puede verse desde distintos ángulos. La corona ha vivido múltiples procesos, logrando mantener su influencia sobre sus colonias, con revueltas independentistas, con enclaves económicos y bases militares en otros territorios.

Canal 13 habló con el especialista en relaciones internacionales, Mauricio Nuñez sobre la implicancia de la figura de Isabel, quien logró cuidar bajo su imagen, a la herencia monárquica de los cuestionamientos y perpetuar el legado imperialista que caracterizó históricamente a Reino Unido.

“Esta mujer ha logrado eclipsar la idea de que la monarquía se cuestione como institución”, describió Nuñez a lo que calificó como uno de los grandes meritos de la reina, cuya influencia se palpa en las expresiones de congoja y de tristeza en las colonias británicas que apoyaron la idea del duelo. “La presencia británica se nota en la zona de Oceanía y Asia, por ejemplo Australia, Nueva Zelanda. Nosotros tenemos la situación de Malvinas, que se ha puesto en discusión”.

La India es uno de los enclaves coloniales más importantes y tiene posiciones encontradas ante lo sucedido. “Desde su independencia, con la figura de Mahatma Gandhi, desde la 'no violencia' han mostrado rebelión frente a la corona”, ilustró.

La respuesta irlandesa ante este hecho resulta una de las pocas voces críticas ante el deceso de la monarca, “Isabel logró tapar la imagen de la represión que generaban las revueltas en Irlanda por la independencia en los 70'”, contó el especialista.

En cuanto al suceso, aseguró que la denominación ‘Carlos III’ para el nuevo rey que asume a sus 73 años resulta sugestiva sobre la impronta que se espera para su reinado, “no es casualidad, el último 'Carlos' que se uso fue en el 1600 cuando la monarquía británica estaba en su etapa de apogeo”, dijo y agregó, “está queriendo, a partir del lugar que le toca ocupar ahora, sostener la institución monárquica con todo lo que eso implica. El rey no es jefe de gobierno pero termina siendo jefe de Estado y en muchos casos tiene poder de decisión en algunas situaciones”.

A tal punto, que el último acto de gobierno de Isabel fue reconocer a Luz Truss, sucesora de Boris Johnson que estaba en el medio de una destitución, renuncia de ministros y moción de censura. También respaldó la politica exterior de Margareth Tatcher en el conflicto armado por las islas del Atlántico Sur en el archipiélago argentino en 1982.

La influencia de la Corona fue retrocediendo, de acuerdo con el entrevistado, desde 1800 en adelante no hace control político directo en sus colonias, sino más bien económico por medio de empresas. “La dominación económica tiene que ver con dar cierto margen político a las colonias para que las decisiones las tomen como territorios, es lo que pasa Australia, Nueva Zelanda o Canadá. Se reconocen de manera amistosa como colonias, pero no necesariamente están en una ligazón política".