El presidente de Chile, Sebastián Piñera, dejó entrever que las manifestaciones que ya causaron 20 muertos en el país trasandino fueron orquestadas desde el exterior. “No es algo espontáneo ni casual”, aseguró.

En una entrevista que publica hoy el diario español El País el mandatario reconoció que “no supimos entender que había un clamor subterráneo de la ciudadanía por lograr una sociedad más justa, más igualitaria, con más movilidad social, más igualdad de oportunidades, menos abusos”.

Desde el inicio de las protestas, el 18 de octubre, hubo 20 muertes, seis de ellas de ciudadanos extranjeros. Todo comenzó en respuesta a la subida del precio del pasaje de metro en la capital, pero luego se transformaron en un reclamo contra las políticas de este dirigente conservador.

 “Ahora nos damos cuenta de que la demanda social era más urgente y más profunda y hay que acelerar el ritmo”, aseguró el mandatario quien además es uno de los hombres más ricos de su país. Igualmente aclaró que “hay que tener muy claro el norte para no caer en la tentación de la demagogia y el populismo”.