Este jueves la Isabel II de Reino Unido falleció a los 96 años. Su reinado fue marcado por ser el más largo de la historia, ya que duró siete décadas. Ella se encontraba bajo observación en Balmoral, su residencia de verano en Escocia. Según detallaron los veceros oficiales, su despedida será en Inglaterra y durará 10 días. 

En las redes sociales del Palacio de Buckingham señalaron "La Reina murió pacíficamente en Balmoral esta tarde. El Rey y la Reina Consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana". En sus últimas horas de vida estuvo acompañada por sus hijos Carlos, príncipe heredero de la Corona británica y nuevo Rey, Ana, Andrés y Eduardo. 

Desde el momento en que dieron a conocer la fatídica noticia comenzaron con el cumplimiento del protocolo estricto, llamado "London Bridge". Es menester mencionar que el mismo fue aprobado por la propia Reina.  Este consta de varios procedimientos elaborados que se llevan a cabo cuando muere un miembro de la familia real.  De acuerdo al protocolo, la primera ministra será una de las primeras en ser informada del fallecimiento de la monarca, algo que sucedió pasadas las 15 horas en Argentina. 

Previo a ello, a los parlamentarios y altos funcionarios les llegará una llamada y un correo electrónico que dirá: "Estimados colegas, es con tristeza que les escribo para informarles sobre la muerte de Su Majestad la Reina". El mensaje se enviará a las otras 36 naciones de la Commonwealth, la Mancomunidad de Naciones, donde la reina continuaba sirviendo como figura simbólica.

Al mismo tiempo se hará el anuncio en las redes sociales y las banderas permanecerán a media asta dentro de los 10 minutos posteriores a la noticia. Los medios de comunicación no están exentos, ya que los presentadores de los informativos se vestirán de luto y se suspenderán los programas. Esto se debe a que se fusionarán las cadenas para dar detalles de la noticia.

El Parlamento será convocado especialmente, habrá 10 días de luto y un acto para formalizar el inicio del reinado del príncipe Carlos, hijo de Isabel II y heredero de la corona británica.

La Reina se encontraba en Escocia por lo que se implementará en operativo Unicornio. Según anticipó el diario Guardian, es probable que su ataúd descanse temporalmente en el Palacio de Holyroodhouse. Luego de ello habría una ceremonial a lo largo de la Royal Mile hasta la Catedral de San Giles, donde se espera que la familia real asista a un servicio antes de un período de reposo de 24 horas, que estaría abierto al público. Lo más probable es que el ataúd sea trasladado a la estación Waverley de Edimburgo para viajar en el Royal Train ( tren real) durante la noche, llegando a Londres a la mañana siguiente.

Desde su llegada a Londres, la llevarían al Palacio de Buckingham antes de la gran procesión ceremonial en Londres prevista para cinco días más tarde.