Los terremotos del 6 de febrero de 7,8 y 7,7 de magnitud en la escala de Richter causaron enormes daños en Turquía y Siria y se cobraron la vida de más de 41.000 personas. Para colaborar en las zonas del desastre un equipo de profesionales argentino viajó y ya rescató a tres personas: una mujer adulta, un niño y una niña.

Según contó el politólogo Sergio Guzmán en Banda Ancha este lunes, Argentina envió un equipo de profesionales para colaborar en las maniobras de rescate, y en lo que llevan de estadía en la ciudad de Hatay, (una de la más afectada por el fuerte sismo), ya rescataron a estas tres personas.

Según detalló el politólogo en Canal 13, este grupo está compuesto por el Voluntariado Civil del Estado, Los Cascos Blancos pertenecientes a la Agencia Argentina de Cooperación Internacional, parte de una Brigada de la Policía Federal y el Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR).

Guzmán detalló que Los Cascos Blancos fue una idea argentina que tomó las Naciones Unidas para los casos de asistencia en este tipo de catástrofes. También contó que a los millones de damnificados por esta tragedia se los está asistiendo en hospitales flotantes, es decir en barcos que hacen las veces de centros de salud. Así como también los asisten en tiendas de campañas.   


Con 47.000 muertos, el terremoto desnudó una trama de corrupción en Turquía