Luego de la polémica que generó el beso que Dalai Lama, líder espiritual tibetano, le dio a un menor de edad en las últimas horas. Se conoció que no es la primera vez que se denuncia esta suerte de abusos en su grupo mas cercano, sino que maestros budistas tibetanos, monjes y laicos fueron denunciados por abuso sexual. Precisamente en 2018, en redes sociales y medios de comunicación se dieron a conocer varios afectados con la etiqueta #MeTooGuru.

Por esos años, uno de los monjes budistas de más alto rango, negó las denuncias de “mala conducta sexual” que, según afirman las víctimas, dejó al menos una víctima suicida. Se presentó un documento de 95 páginas presentado a las autoridades chinas, en el que se denunciaba a dos monjes varones del Templo Longquan de Pekín. Se los acusó de acosar a varias monjas.

El informe contiene ejemplos de varios mensajes explícitos de Xuecheng a seis monjas. En estos se afirma que el monje exigió total obediencia a las mujeres, incluidos los favores sexuales, como parte de su “estudio de las doctrinas budistas”. El documento aborda distintas historias de las presuntas víctimas, algunas de las cuales quedaron devastadas por sus experiencias.

También se reportó que en otros países, como Holanda, donde hay entre 50,000 y 65,000 budistas, algunos de los discípulos o estudiantes que sufrieron abusos eran menores de edad cuando ocurrieron los hechos.