En Estados Unidos un niño se salvó de ser raptado por una mujer gracias al rápido accionar, en base a los consejos que sus padres le daban sobre cómo manejarse en la calle. Una regla de oro es "no hablar con personas desconocidas y mantenerse al resguardo". Un video de la cámara de vigilancia de un local registró el momento. 

El hecho ocurrió en Pottstown, estado de Pensilvania. El protagonista de esta historia se llama Sammy Green, un niño de 10 años. El menor caminaba a su hogar cuando había salido de la escuela, hasta que en el trayecto notó que una mujer se acercaba de forma sospechosa y comenzaba a seguirlo. 

La señora comenzó a conversar y le dijo que era una supuesta amiga de su padre y que le pidió el favor de pasar a buscarlo por la escuela. Además, le prometió comprarle comida en una gasolinera cercana a donde estaban. Pero al niño le pareció raro y comenzó a caminar con más prisa hasta que llegó a una tienda en la que solía ir con su padre. Él entró y la mujer esperó afuera. 

El niño le pidió ayuda a la cajera que estaba de turno en ese momento, Hannah Daniels: “Él me dijo que actué como si fuera su mamá. De inmediato entendí que algo ocurría”, relató la trabajadora a la prensa.

En las cámaras de seguridad de la tienda se ve cómo la joven trabajadora se levantó de su silla, se acercó a la puerta y la cerró.

Por fortuna la policía ya pudo identificar a la sospechosa y aseguraron que en la actualidad se encuentra en tratamiento psiquiátrico.

(Con información de La Nación)

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(Con información de La Nación)