El Club Audiovisual de Sarmiento nació de la mano de unos jóvenes apasionados por el arte y las historias locales. Con el objetivo mostrar a su lugar de nacimiento, comenzaron a plasmar las voces de su pueblo a través del arte cinematográfico. 

Brian Espinoza es el vocero de este grupo de 10 jóvenes quienes trabajan activamente para buscar ideas y plasmarlas luego en un producto final. Los chicos y chicas que componen el club tienen como idea fija crecer y consolidarse como un espacio en el que todos puedan expresar su creatividad y divertirse. 

El joven, quien es profesional en el rubro del audiovisual, comentó que todo inició en noviembre. Fue ahí cuando con un grupo de amigos a quienes les interesa el mundo audiovisual, iniciaron con el plan. Todos ellos son apasionados por el proceso y el disfrute de ver el proyecto finalizado.

Según relató Brian, este club que busca ser como el que retratan en las películas extranjeras, es un escape para pasar el rato y olvidar o canalizar por otro lado las problemáticas actuales.

Para poder difundir sobre sus proyectos crearon una cuenta de Instagram en la que también invitan a más chicos y chicas a participar. Del mismo modo, Brian explicó sobre cómo es el proceso de creación: "Salen ideas muy locas, siempre locales. A veces hacemos ficción de personajes de Sarmiento y en otras ocasiones creamos documentales. Ahí comenzamos con el guionado, puesta en escena y edición".

Ampliar contenido

A su vez subrayó que suelen sacar la cámara y buscar historias, las cuales están seguros servirán para que futuras generaciones conozcan sobre lo que hoy sucede en el departamento. Sobre ello, el joven aclaró: "Uno de los ejemplos de los proyectos fueron tomas del terremoto, así visibilizamos a quienes no tienen voz y dejamos un registro de lo que pasó".

En cuanto a las producciones, expresó que ya tienen 4 creaciones finalizadas, aunque solo publicaron 2 más el especial del terremoto del pasado lunes. Es así como estos chicos sarmientinos tienen la finalidad de seguir creciendo y generado ideas a través de un pasatiempo sano que les permite visibilizar historias locales y crear contenido que quede como archivo para las posteriores generaciones.