"Cuentas claras mantienen los amigos", dice el dicho. Esto es lo que buscó el intendente Alfredo Castro en el departamento Sarmiento la tarde del jueves en el Centro Cultural, al dar a conocer los gastos realizados en la fiesta departamental de agosto pasado.

Días anteriores hubo críticas encabezadas por los concejales de la oposición, quienes solicitaron un informe debido a que, según alegaban, no había pasado información por el legislativo sobre las erogaciones.

Quien alzó la voz fue Diego Cortez, concejal y presidente de la junta departamental del Justicialismo. En su argumentación, mencionó que varios municipios habían cancelado sus fiestas departamentales debido a la falta de recursos; sin embargo, en el sur del departamento no fue así. Por esa razón, solicitaron que la información estuviera disponible. Además, Cortez hizo referencia a la falta de un convenio entre el municipio y el dueño del predio privado donde se realizó la fiesta, algo que, según él, nunca fue discutido en el Concejo Deliberante de Sarmiento. Cortez también destacó que pidieron una reunión con Castro para discutir el tema, sin recibir respuesta.

No obstante, diez días después de la fiesta, llegó la aclaración. En una conferencia de una hora, Castro, acompañado por los directores de gestión y los ediles de su confianza, presentó las cifras que preocupaban a la oposición. Curiosamente, aunque el informe había sido solicitado por el bloque justicialista, ellos no asistieron al evento.

"Fue una gran fiesta", comenzó diciendo Castro, quien destacó que esa conferencia, con la presencia de varios vecinos, era parte de un esfuerzo por la transparencia. "Queremos rendir cuentas porque estos son recursos de todos", afirmó, y comenzó a brindar información precisa sobre los expedientes generados en torno al evento, que duró tres días. Además, aclaró que no fue solo una fiesta municipal, sino que se organizó en conjunto con agrupaciones gauchas que hicieron un gran esfuerzo.

Entre un vaivén de cifras, Castro detalló cada uno de los gastos realizados por el municipio en sonido, cantantes, locución, catering, desfile, sillas y otros elementos. Aseguró que el mayor gasto fue en los artistas, quienes cobraron 24 millones de pesos entre los dos principales cantantes (Sergio Galleguillo y Damián Córdoba).

En total, señaló que los gastos ascendieron a 44 millones de pesos, aunque en realidad el costo total fue de 49 millones. Esto se redujo gracias a donaciones de empresas como Solfrut, Calera San Juan y Calera Filo, que aportaron más de 3 millones de pesos. Además, con la recaudación de los puestos instalados en el predio, el municipio obtuvo 2 millones de pesos, ahorrando así más de 5 millones. Esta cifra fue puesta a disposición del público, junto con la numeración de los expedientes y sus respectivos gastos, destacando que la fiesta posicionó al municipio en la agenda cultural de la provincia.

Refiriéndose a uno de los cuestionamientos de la oposición, Castro aseguró que el predio no fue pagado, ya que fue una donación del propietario. Para respaldar esta afirmación, habló Emiliano Riviello, dueño del terreno, quien expresó que, cuando le informaron para qué sería utilizado, lo puso a disposición, subrayando que "siempre está abierto a la comunidad para cuando lo necesiten"

Luego de explayarse sobre la fiesta, Castro dio a conocer los gastos mayores de cada dirección, con el objetivo de transmitir un mensaje de transparencia en la gestión. ¿Habrá dejado conformes a los concejales justicialistas?