El panorama parece ser complicado para dos efectivos de la Policía de la Provincia porque desde este último fin de semana comenzaron a ser investigados por el presunto pedido de coimas a un distribuidor de bebidas.

Es la justicia de la Segunda Circunscripción Judicial la que lleva adelante la investigación y solicitó el plazo de un año para investigar el presunto cohecho suscitado por dos efectivos de la División Tránsito mientras realizaban un operativo en la zona de Niquivil.

Los investigados, que fueron pasados a situación pasiva, según consigna una nota periodística de Diario de Cuyo, para no hacerle una multa al distribuidor, le habrían pedido un pack de seis gaseosas y seis fernet. Todo porque la Ford F-100 en la que se desplazaba el trabajador, contaba con algunas irregularidades relativas a las luces traseras y el sistema de remolque.

A mediados de la semana pasada, ambos efectivos policiales habían sido detenidos por pedido del fiscal de la UFI Norte, Gastón Salvio, pero luego recuperaron la libertad el último viernes, según lo dispuso el juez de Garantías, Domingo Castro.   

El presunto hecho habría sucedido el martes pasado (27 de agosto), sobre RN40, cuando el repartidor fue detenido en un control. Ante las irregularidades de la movilidad, los efectivos habrían pedido las bebidas, a lo que el conductor accedió. Al regresar al trabajo, éste le contó al patrón lo que había sucedido, por lo que el jefe decidió denunciar el hecho. Al tomar intervención la justicia, los investigadores habrían logrado encontrar las bebidas detrás de unos matorrales en la zona de la garita en la que estuvieron trabajando los efecticos, acción que los complicó ante la pesquisa y situación judicial.