Cuatro menores se fugaron del Nazario Benavídez ¿Quiénes son y cómo hicieron?
Los adolescentes son de Chimbas, Rawson y Santa Lucía, por lo que creen que estarían en viviendas de amigos, con el objetivo de evadir a las autoridades.
Hace dos días se fugaron cuatro menores del Instituto Nazario Benavídez. La búsqueda de las autoridades para dar con su paradero continúa sin dar resultados positivos. A pesar de los intensos operativos desplegados hasta la madrugada del sábado, las tareas no han dado frutos y las fuerzas policiales han decidido cambiar de estrategia.
De acuerdo con lo dieron a conocer en el medio Tiempo de San Juan, el escape de los adolescentes de 17 años fue planificado. Los menores aprovecharon una distracción de los custodios para huir del instituto, donde cumplían medidas por delitos contra la propiedad. Fuentes cercanas a la investigación indicaron que los prófugos no están involucrados en homicidios ni abusos, pero poseen antecedentes por robos.
Los jóvenes fugados fueron identificados, y se revelaron sus lugares de procedencia. Dos de ellos residen en el departamento de Rawson: uno en el barrio Valle Grande y otro en la Villa Hipódromo. Los otros dos son oriundos de Alto de Sierra, en Santa Lucía, y del barrio Parque Industrial, en Chimbas.
El escape fue facilitado por las características del lugar, que no cuenta con las medidas de seguridad de una cárcel. Según las fuentes, el instituto está rodeado por un alambrado fácilmente cortable y se encuentra en una zona de descampado y monte, lo que habría permitido a los menores escapar sin ser detectados. A diferencia del Penal de Chimbas, el Instituto Nazario Benavídez se asemeja más a una escuela hogar, con un enfoque en la resocialización de los jóvenes, lo que implica menos restricciones.
Una de las hipótesis que se maneja es que los menores huyeron a campo traviesa. Otra teoría sugiere que tenían cómplices esperándolos en la Ruta 12, quienes los ayudaron a escapar. "Nada se descarta", afirmaron las fuentes. Con la sospecha de que los prófugos se encuentran juntos, las autoridades han modificado su enfoque. En lugar de continuar con el rastreo en las inmediaciones del instituto, han optado por labores de inteligencia. Se cree que los menores podrían estar buscando refugio en casas de conocidos para evadir a la policía.