Depravado en moto manoseó a por lo menos 6 jóvenes
En la localidad de Casuarinas un grupo de muchachas se hartó de que la Policía mire para un costado archivando denuncias por acoso sexual.
Un hombre en moto atemoriza a las mujeres en 25 de Mayo. Desde hace un tiempo, el depravado se les acerca con el motor del rodado funcionando, las manosea, las insulta y se da a la fuga. Las víctimas, hartas de que el personal policial de la Comisaria 32º de Casuarinas mire para un costado archivando sus denuncias, decidieron actuar agrupándose mediante un grupo de WhatsApp en donde se mantienen informadas y dando a conocer estas situaciones que se dan en el departamento.
Leire Cortés, una muchacha al frente del grupo denunciante contó: ‘Muy importante que se viralice esta situación espantosa. Al motociclista lo ubicamos ya, aunque desconocemos su identidad porque va con casco, con la recopilación de cada una de las chicas agredidas, formamos el perfil, pero la Policía no le da importancia a todo esto que pasa’, afirmó.
Según contó la joven, una de las últimas víctimas fue una estudiante menor de edad, a la que este sujeto al intentarla tocar, la hizo caer para luego arrastrarla varios metros. ‘Todo esto pasó a plena luz del día, pero nadie vio nada. Fue a la salida de la escuela’, comentó indignada al recordar el episodio.
Uno de los domingos de enero del 2021 al mediodía, una joven salió a comprar cerca de su casa, y en la esquina de su domicilio se encontró con dos hombres mayores de edad que desde el interior de una camioneta blanca estacionada, uno de ellos le dijo: ‘Como hiciste para ser tan linda’. Fue entonces que la muchacha le contestó: ‘Callate viejo verde’.
Acto seguido, totalmente sacado de si, uno de los hombres mayor de 55 años, que estaba borracho, se bajó del vehículo, la tomó del brazo y la puso contra el chasis del rodado. La joven aterrada empezó a gritar, pero a pesar de que todo esto ocurría a plena luz del día solo un hombre le gritó y una mujer amenazó al abusador con llamar a la Policía.
Lo más indignante para la veinticinqueña no fue lo que tuvo que esperar en la Comisaría 32º para poner la denuncia, sino que uno de los efectivos le preguntó: ‘¿Y vos ibas así vestida?’. Las palabras del uniformado hicieron perder la paz, por lo desubicado del planteo, y porque les dio datos más que suficiente para que al hombre que la atacó lo detuvieran. ‘Les di patente, rostro, edad aproximada, ropa accesorios. No sé qué más necesitan para salir a buscarlo. Todavía estoy esperando el llamado de reconocimiento facial’, se quejó.