Le robaron hasta las llaves de su casa a un periodista sanjuanino: 'Fue terrible'
Se trata de un comunicador especializado en deportes que había dejado estacionado su auto y al regresar descubrió que le reventaron una ventanilla. En esta nota con Diario 13 contó cómo ocurrió esta indeseable hecho.
Sobre el cierre del pasado jueves 29 de febrero un conocido periodista deportivo de San Juan vivió una indignante situación. A este comunicador le destruyeron uno de los cristales de su auto para robarle todos los objetos de valor que habían dentro. Incluso le llevaron la llave de su casa, provocando que no pudiera entrar por más de 24 horas.
El afectado es Cristofer Díaz, el periodista que es mayormente conocido por cubrir la actualidad del Club Atlético San Martín de San Juan desde hace varios años. El mismo había llevado a su hija a clases de gimansia rítmica, dejó estacionado su auto en la zona y luego se retiró. Esa situación fue aprovechada por delincuentes que se detuvieron al lado del rodado entre las 20:15 y las 20:30 de la mencionada jornada, para destruir una ventanilla y así tener acceso a lo que el trabajador gaurdaba dentro.
'Me afanaron, me rompieron el auto y me llevaron un montón de pertenencias que tenía dentro. Me robaron documentación, dinero, elementos técnicos, dispositivos y hasta papeles que no eran míos. Mi familia esta bien que es lo más importante, pero materialmente hemos perdido un montón de cosas. Ha sido terrible', contó.
Además del ilícito, los malvivientes le generaron otro gran dolor de cabeza a Díaz. Esto se debe a que entre el botín que se llevaron estaban las llaves de su casa y el dinero que tenía en efectivo fuera de su hogar, por lo que tuvo que pedirle a un conocido que lo ayudara a pagarle a un cerrajero.
'En la mochila que me llevaron tenía las llaves, entonces no tenía como entrar. Tuve que pedirle un préstamo a un amigo para poder pagarle a un cerrajero para poder entrar recién a las 10:00 del viernes a mi casa, siendo que salí a las 06:00 del jueves. Tuve que hacer todo de nuevo. El profe de mis chicos se los tuvo que llevar hasta la casa de mis viejos en Chimbas y yo después tuve que ir a buscarlos. Todo un quilombo la verdad', señaló.
Esto se suma a que estuvo desde las 23:30 del 29 de febrero hasta las 03:00 del viernes 1 de marzo en la comisaría haciendo una denuncia, que finalmente no sirvió de nada. Esto se debe a que por el tipo de documentación que le robaron, debía hacer un trámite diferente segúin lo que le informaron las autoridades, por lo perdió casi 4 horas de su tiempo en este procedimiento sin sentido.
'Entre las cosas que me robaron estaba el cargador del celular así que me andan prestando cargadores para poder ir contestando a toda la gente que me habló preocupada por que se enteraron lo que me pasó. Entré a la comisaría a las 23:30 y salí recién a las 03:00 del otro día. Tengo que presentar otro tipo de denuncia, la que ya había hecho no sirvió. Tengo que presentar una más para presentar la cancelación de unos pagos en los lugares que corresponda. Es un quilombo la verdad', sentenció.