Una situación horrorosa se vivió recientemente en la provincia de Misiones, más precisamente en la ciudad de Posadas. Lo que sucedió fue que un hombre quiso dejar flores en la tumba de su bebé fallecido, pero cuando llegó al cementerio se encontró con la sorpresa de que se había llevado el ataúd. 

El afectado es un hombre de 54 años de edad, llamado Rogelio Antonio Ríos, que quiso ir a visitar a su bebé fallecido en el año 2003, el cual se encontraba sepultado en el Cementerio La Piedad de la ciudad de Posadas. Sin embargo esto no fue posible ya que cuando Ríos llegó al lugar donde descansaban los restos, sólo se encontró con un profundo hueco en la tierra.

Debido a esto el furioso hombre acudió a la administración de este establecimiento para que le dijeran que había sucedido. El personal le contestó que el hueco se había hecho en la tumba siguiente a la de su hijo. No obstante cuando fueron a comprobarlo y desenterraron el ataúd de al lado, descubrieron que se encontraba completamente vacío.

Ante esta situación la víctima de este hecho radicó una denuncia en la Comisaría Segunda. A raíz de esta presentación el Juzgado de Instrucción 2 tomó intervención, a cargo de Juan Manuel Monte. Esta autoridad ordenó que se realizaran tareas en el lugar, para poder reunir todas las pruebas posibles, para tratar de descubrir que fue realmente lo que sucedió y quienes fueron los responsables.