Un hecho indignante se produjo durante la noche del pasado viernes de 2 abril en la provincia de Córdoba, más precisamente en Villa María. Lo que sucedió fue que alrededor de 1.000 personas llevaron a cabo una multitudinaria fiesta clandestina. Cuando las autoridades llegaron al lugar los fiesteros comenzaron a correr.

Este acto de irresponsabilidad se dio justo en un momento en donde Córdoba esta sufriendo una crecida de contagios de Covid 19. En este contexto la Policía de dicha jurisdicción intervino en un total de tres fiestas clandestinas en una misma noche. Sin embargo una de ellas fue mucho más grave que las restantes.

Se trata de un festejo ilegal que se estaba desarrollando en Villa María. En este lugar habían unas 1.000 personas protagonizando una celebración indebida. Al percatarse de la presencia de los oficiales estos irresponsables comenzaron a huir velozmente en los 160 vehículos que estaban estacionados en la zona.

Ninguno de ellos pudo ser atrapado. Posteriormente dentro de la misma localidad se frenó otra fiesta, en esta caso con 150 personas que se movilizaron en 60 rodados. Finalmente los uniformados concretaron un tercer allanamiento en un vivienda donde habían 30 fiesteros.