En la tarde de este martes un hombre se acercó a un kiosco que estaba cerrado para pedir que le  pesen una bolsa de pasas. La mujer que atendía accedió fingiendo que no se dio cuenta que estaba por robar una bicicleta que estaba en la entrada del local.

El delincuente, que no quería ser visto por la kiosquera, aprovechó cuando se dio vuelta para extraer la movilidad rodado 24. Sin embargo,  Rebeco Eduardo, joven de 22 años, fue aprehendido en el intento. El delito quedó caratulado como “hurto en grado de tentativa”.