Este martes la vicepresidenta Cristina Fernández publicó en redes sociales una contundente carta en la que compara la deuda adquirida durante el gobierno de Mauricio Macri con la pandemia de Coronavirus. La carta se da en medio de las negociaciones del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional para reestructurar la deuda de 44 mil millones de dólares que contrajo la administración de Macri en 2018

"En el año 2021, la pandemia macrista fue para el Estado Nacional incluso más costosa que la pandemia COVID-19", advirtió la expresidenta, al precisar que la pandemia macrista representó el 1,1 por ciento del PBI en dólares. Mientras que, durante la pandemia, se ubicó en torno al 0,9 por ciento, pero en pesos.

En ese sentido, explicó que a raíz de la deuda tomada durante el macrismo, "en el año 2021 Argentina pagó -entre capital e intereses- 5.160 millones de dólares al FMI por los vencimientos de ese año correspondientes al préstamo Stand By que el organismo le otorgara a Mauricio Macri en el año 2018". Y agregó: "Ese monto representa, nada más ni nada menos que el 1,1 por ciento del PBI… ¡Pero en dólares!".

Como contracara expuso que "en ese mismo año 2021, Argentina pagó 420.000 millones de pesos que fueron destinados estrictamente a las medidas tendientes a mitigar los efectos de la pandemia". "Allí están incluidas las Vacunas COVID ($124.000 M), REPRO II ($90.000 M), Asistencia al turismo – Previaje($31.000 M) y reducción de contribuciones patronales a empleadores de REPRO II y Sector Salud ($51.000 M), además de la Ampliación de Políticas Sociales. Ese monto representa el 0,9% del PBI… ¡Pero en pesos!".

Este lunes se conoció que la reunión que iban a mantener el ministro de Economía, Martín Guzmán, con los principales referentes de Juntos por el Cambio quedó postergada sin fecha. En ese encuentro, el titular de la cartera económica iba a brindar un informe ante el principal bloque opositor sobre las negociaciones que el Gobierno de Alberto Fernández lleva adelante con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para reestructurar los vencimientos de la deuda externa.