Al pedido de Alfredo Cornejo de unificar a toda la oposición en San Juan, el presidente de la UCR local, Antonio Falcón, contestó que no. Admitir una alianza con el partido ADN es inaceptable para el Frente Con Vos. Con Cruzada Renovadora tampoco es viable. Apenas podrían llegar a cerrar un pacto de no agresión para identificar al oficialismo como único adversario. Pero siempre con la certeza de que cada uno seguirá por su andarivel, sin mezclarse.

Cornejo les pidió unificar porque sabe sumar. Si en las legislativas 2019 la tercera fuerza obtuvo 6 puntos, no son amenaza en una interna pero eventualmente será una resta si hay división. De hecho los autodenominados Consenso Ischigualasto también tributarán a nivel nacional a Juntos por el Cambio, si los dejan. Entonces, que compitan por separado terminará siendo una buena noticia para el Frente de Todos.

En 2019 el espacio integrado por ADN, Cruzada y otros como el Partido Socialista, jugaron con Roberto Lavagna. Pero el exministro de Economía los defraudó porque luego se acercó al presidente Alberto Fernández y su propio hijo, Marco Lavagna, quedó al frente del INDEC. Entonces a nivel nacional no hay más alternativa que la grieta. Si no es con el Frente de Todos, es con Juntos por el Cambio.

Ahora bien, si la representación de Juntos por el Cambio está en San Juan en manos del Frente con Vos, ¿cabe habilitar otra franquicia en paralelo? Se verá. Dependerá de lo nacional. Cornejo hizo su esfuerzo después de recibir en abril una delegación de Consenso Ischigualasto en Mendoza. También escuchó un planteo semejante Patricia Bullrich. Y el diputado nacional Maximiliano Ferraro, cabeza del ARI-Coalición Cívica en Buenos Aires.

Consenso Ischigualasto tiene algunos integrantes destacados del PRO, como Hugo Ramírez y Fernando Patinella, pero están trabajando por afuera de la estructura orgánica. También están algunos radicales disidentes pero bien vinculados a nivel nacional como Carlos Quevedo Mendoza. Y tienen al conductor de la junta promotora del ARI-Coalición Cívica en San Juan, es decir, al referente principal de Lilita Carrió en la provincia. Pero nada de esto alcanza para justificar la unidad.

No al menos desde la perspectiva de Marcelo Orrego, reconocido como el líder del Frente Con Vos y del Frente Juntos por el Cambio también. Es la referencia sanjuanina a nivel nacional, mucho más desde que desembarcó en el Congreso.

El santaluceño ha planteado que no se puede unificar simplemente por el ánimo de sumar. Sostuvo que debe existir un plano de coherencia de fondo. No es una discusión de 2021, claramente, sino una preocupación a futuro. Si sella un pacto político ahora, por apenas una o extraordinariamente dos bancas en el Congreso, en realidad estará comprometiéndose a sostener el acuerdo para 2023. Y eso es otra cosa.

Orrego está convencido de que esta pelea en 2021 será la línea de largada para 2023. Por lo tanto, es mucho más que una elección de mitad de mandato por apenas tres bancas en el Parlamento. Es el cimiento para la construcción provincial. Y está persuadido de que la grieta no deja espacio para terceros. Por lo tanto, no necesita ningún otro aporte más que lo que ya tiene. O al menos es lo que entiende y explica su negativa a fusionarse con Consenso Ischigualasto.

La gran diferencia de esta oportunidad con respecto a 2019 sería la identificación de los dos espacios con Juntos por el Cambio a nivel nacional. Esa bifurcación podría tener un efecto todavía indescifrable. Por supuesto dependerá de los candidatos que lleve cada uno, cuánto midan efectivamente. Pero siempre será interesante el guarismo definitivo, a la luz de la aparente división de un mismo electorado opositor.

Uno de los argumentos para repeler el acuerdo con Consenso Ischigualasto es que José Peluc, de ADN, hoy ocupa la delegación del Enacom en San Juan y esa es una función que depende de un decreto del presidente de la Nación. Pero Peluc ha ofrecido renunciar si ese fuera el obstáculo. Otro de los impedimentos es la postura antiminera de algunos integrantes de Consenso Ischigualasto, como el GEN que integra Marcelo Arancibia, el expresidente del Foro de Abogados.

Es cierto que una diferencia de esta magnitud sería difícil de soslayar en un acuerdo político. Pero se ha hecho antes. Sin ir más lejos, en el antiguo Frente para la Victoria convivieron los defensores militantes de la minería, como José Luis Gioja, con los más críticos, como Daniel Filmus, impulsor de la Ley de Glaciares que todavía está en discusión.

Dicho de otro modo, cuando hay un interés político superior, la letra fina de los pactos se puede acomodar. Hay evidentemente una circunstancia estratégica que divide a la oposición en San Juan. Posiblemente sea alguna cuestión de arrastre. O simplemente la convicción de Orrego de que puede construir con los propios sin apelar a las alianzas de coyuntura, como hizo históricamente su antecesor Roberto Basualdo. Alianzas que al poco andar terminaron desarmadas.

Ningún otro dirigente nacional llegó tan lejos como Cornejo, al intervenir directamente en San Juan. Eso hizo, cuando pidió a los suyos un esfuerzo. Le contestaron que no. Fue un anticipo bastante categórico para el cierre de frentes electorales, previsto para el 14 de julio. Nuevamente la provincia se encamina a un comicio polarizado y un tercero desafiado a mostrar cuántos votos tiene.


JAQUE MATE