Incluso en el gabinete de ministros y ministras dicen que solo Sergio Uñac sabe a ciencia cierta cuál es su plan electoral para 2023. Dan por sentado que intentará la re-reelección. Pero el resto depende bastante de cómo se termine de configurar el tablero. Hecha esta aclaración, en el peronismo y aliados consideran que podrían jugar con tres candidatos a gobernador que aporten segmentos diferentes en la sumatoria de la Ley de Lemas.

Uno sería Uñac, aunque el anuncio oficial quedará para después del Mundial de Qatar. ¿Eso significa que la semana próxima habrá confirmación? Difícilmente el conductor se exponga tan anticipadamente. Incluso llamando a elecciones en abril y firmando el decreto en enero, podría preservar el misterio hasta 50 días antes del comicio. Ese es el plazo establecido por la ley vigente.

Sin embargo, internamente, intendentes y diputados aseguran que el propio Uñac les reveló su intención de competir. Que quede anotado entonces como uno de los tres candidatos a gobernador del borrador oficialista. El segundo sería José Luis Gioja.

A diferencia de Uñac, el diputado nacional nunca jamás dijo ni siquiera en privado, con los más íntimos, que tenga pensado anotarse en la carrera. Viene sugiriéndolo en discursos elípticos, acompañado por pintadas y hashtags en redes sociales: #GiojaVuelve. Pero de su boca todavía no salieron las palabras.

Lo más cercano a un anuncio fue el tuit de Juan Carlos Gioja. Fue el 28 de noviembre pasado, cuando el diputado rawsino posteó que hay que 'crear las condiciones políticas para que José Luis Gioja sea candidato a gobernador'. La declaración vino acompañada por un par de condimentos. Habló del 'seguro adelantamiento de elecciones provinciales' y de la 'imposibilidad legal' de Uñac de ir por otro mandato.

La discusión constitucional está planteada en el foro político, pero hasta tanto no se formalicen las candidaturas de acuerdo al calendario electoral, no habrá posibilidad de hacer intervenir a un tribunal. Por lo tanto, lo que se diga o escriba quedará para el archivo.

Lo cierto es que el posteo de Juan Carlos aportó al borrador oficialista alguna pista sobre las intenciones de hacer competir a José Luis Gioja. Luego habrá que ver si consideran que están dadas 'las condiciones políticas' o no, llegado el momento de la verdad. Será otra definición guardada hasta el día mismo del cierre de listas, 50 días antes del comicio.

Uñac por un lado y Gioja por el otro, son dos de las tres listas del borrador oficialista para la sumatoria cooperativa de la Ley de Lemas. El tercero es todavía más difuso, pero está ya en la consideración de los operadores: Franco Aranda.

Dejó algunas pistas en este sentido el pasado viernes en Banda Ancha el exconcejal capitalino Gabriel Castro, mano derecha del arandismo. Luego de un quiebre áspero con Uñac y hasta un coqueteo con Juntos por el Cambio, vino el acercamiento. Todavía no se atreven a hablar de reconciliación, pero sí de 'gestos' que posibilitan pensar en una confluencia para 2023.

La tregua se materializó durante la última visita del secretario de Industria y Desarrollo Productivo de Nación, José Ignacio De Mendiguren, el 17 de noviembre. No ha pasado un mes todavía desde que hizo pie en la provincia 'el Vasco', referente de primera línea del massismo. Uñac lo recibió en Casa de Gobierno y Protocolo invitó a Aranda para que estuviera presente en la reunión. El gesto fue muy bien recibido por el Frente Renovador. Hay varias cuestiones todavía por conversar, pero la comunicación se rehabilitó luego de varios meses de ruptura.

Uñac echó a Aranda del directorio del Banco San Juan en julio, luego de que el massista se pronunciara públicamente en contra de un nuevo mandato del gobernador. En lo sucesivo, el líder del Frente Renovador tuvo posiciones críticas sobre distintos aspectos de la política oficial. Por ejemplo, definió a la Ley de Lemas como un retroceso. Sin embargo, el tiempo pudo apaciguar los ánimos. El tiempo y la coyuntura también.

Los operadores van y vienen. Hay interés en que Aranda pueda jugar a escala provincial, como candidato a gobernador, como tercera alternativa a la par de Uñac y de Gioja. Para que este esquema funcione en términos electorales, el Frente Renovador debería sentarse en el Frente de Todos como uno de los firmantes. Eso sucederá apenas 10 días después del decreto de convocatoria, cuando se constituyan las alianzas.

El Frente Renovador obtuvo la personería política como partido el 6 de diciembre de manos de la Justicia Federal. Eso le permite aspirar a un trato diferente. Por otro lado, en el transcurso de este mes tendrían referentes en 15 de los 19 departamentos. Con solo armar listas en 10 municipios, Aranda podría ser candidato a gobernador. Pero eso es solo en términos estrictamente legales.

En estos días el exintendente de Capital viajaría a Buenos Aires con la intención de reunirse con Sergio Massa o, en su defecto, con algún referente de primera línea. La parsimonia porteña no cuadra con la urgencia sanjuanina. El contraste se explica en que las elecciones presidenciales recién se discutirán en el segundo semestre. Aquí, en la provincia, la carrera ya empezó. El que no tenga herramientas para instalarse de inmediato, jugará en desventaja.

¿Qué necesita Aranda de Massa? El guiño final para anotarse como candidato a gobernador. Hasta ahora le han dicho que trabaje, que se instale, que arme estructura. Eso ha venido sucediendo progresivamente. Pero para dar el siguiente paso hace falta un espaldarazo de otro tipo.

Para el oficialismo, por el momento, Aranda es uno de los potenciales candidatos que debería aparecer en la grilla, con su aporte específico de votos. La Ley de Lemas o Sistema de Participación Amplia y Democrática (SIPAD) se ocupará de sumarlo todo. Cada punto cuenta.


JAQUE MATE