Una paradoja. El estallido jujeño puso nuevamente la grieta política en primer plano, pero generó una tregua momentanea entre quienes parecían irreconciliables: Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich de un lado, Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner del otro. Sin embargo, la caldera de la interna sigue elevando la temperatura. Las llamaradas no tardaron en llegar a San Juan.

Luego de una prolongada estadía en Buenos Aires, Eduardo Cabello asistió a Casa de Gobierno el martes por la tarde junto al resto de los legisladores que integrarán el bloque justicialista los próximos cuatro años. Un día después tenía invitación para volver a Desamparados, esta vez para mantener un encuentro a solas con Sergio Uñac.

Entre una reunión y la otra, Cabello pasó por Banda Ancha y dejó un par de definiciones filosas. Dijo que esta elección nacional será una bisagra porque se avecina el fin de ciclo para el kirchnerismo. Y dijo también que Nación le está 'pisando la manguera' de los fondos para obra pública a San Juan.

Parece impensable que el secretario general de la UOCRA y líder de la CGT esté hablando a título personal. No cabe imaginarlo moviéndose a espaldas de Uñac. Sigue siendo el vicepresidente primero de la Cámara de Diputados, la tercera autoridad en la línea sucesoria. Por lo tanto, sus palabras retumban doblemente.

Mientras Uñac mantiene el teléfono abierto con todos los sectores del peronismo nacional, Cabello se puede permitir algunas expresiones más tajantes. Incluso, puede hacerlo con las cámaras encendidas, sin el refugio del off the record, como lo hizo días atrás una alta funcionaria uñaquista en términos bastante parecidos.

Aquella vez, la dirigente reconoció en privado que prefieren acompañar a Daniel Scioli en la interna nacional. Que de ninguna manera se ven trabajando para la candidatura de Wado De Pedro. Sin embargo, es algo que el propio Uñac no ha resuelto o, si lo hizo, aún no se pronunció oficialmente. Este miércoles en Canal 13 Cabello habló en nombre del movimiento obrero.

Dijo que la CGT pide abrir la competencia a través de las PASO, como viene reclamando Scioli con el respaldo del albertismo. El sindicalista rechazó la lista de unidad porque sería equivalente a una imposición. Al dedo. Y reconoció que en la primaria están más cerca de Scioli que de cualquier otro. Curiosamente, también miran con atención a Sergio Massa.

De todas formas, el ministro de Economía sigue militando la fórmula de consenso, en buen romance con Cristina y La Cámpora. Y este último sector le provoca indigestión a Cabello. También a otros dirigentes del uñaquismo que por ahora se privan de exponerse públicamente.

Cabello puso como ejemplo indeseado la fórmula Fernández-Fernández, de 2019. Dijo que si a Scioli o a Massa los 'obligan' a llevar un candidato a vicepresidente definido por La Cámpora, eso tendría final cantado. En sus propias palabras: 'Ya hemos sufrido las consecuencias, en muchas cosas al presidente lo han bloqueado'.

¿Acaso Cabello está tomando la vanguardia de lo que vendrá en apenas 48 horas, cuando termine el plazo para inscribir listas? Efectivamente, este sábado 24 de junio no solo estarán definidas las fórmulas para presidente y vice sino que también los principales referentes del peronismo sanjuanino habrán tomado posición al respecto. Zambullirse en ese barro será inevitable. 'La interna nacional nos va a traer seguramente algunos choques', reconoció el sindicalista.

Decir que el kirchnerismo está cumpliendo un ciclo y se encuentra en retirada seguramente será ofensivo para los compañeros que militan a Cristina y están acompañando a Uñac en San Juan. Sergio medirá cuidadosamente sus acciones en estas horas finales para, fundamentalmente, preservar el poder en la provincia. No se puede separar una cosa de la otra: apenas una semana después de inscribir listas para senadores y diputados nacionales habrá que votar por gobernador y vice.

En paralelo, José Luis Gioja ya se pintó con los colores de Cristina, Wado y Massa, entendiendo que esa será una de las alternativas en disputa. En frente estará el albertismo condensado en Scioli, Tolosa Paz y otros. ¿Será esta la división entre los peronistas sanjuaninos también?

Uñac habla con todos. Hasta con Cristina. Pero hay más factores a considerar. Según Cabello, la demora de los fondos nacionales para obra pública no es un accidente. No obedece solamente a los pagos que hay que hacerle al Fondo Monetario Internacional o al ajuste del gasto, sino a una acción deliberada. Lo vinculó a la intención de Massa de proyectarse como candidato presidencial sin tener la sombra de ningún gobernador. 'Si es un apriete, si es una pisada de manguera, pará', dijo el secretario general de la UOCRA.

Si Uñac suscribiera a esta teoría, pocos motivos tendría para acompañar a Massa en una eventual candidatura presidencial. Pero no será la primera vez que tienen roces entre ambos y siempre, hasta ahora, pudieron superar las diferencias y seguir adelante. Los une el pragmatismo.

Esta es la grieta de la grieta: el quiebre interno del peronismo que pide a gritos liquidar las diferencias en las primarias del 13 de agosto. Ya lo dijo el mismísimo Alberto Fernández en marzo pasado, cuando se filtraron los chats con el periodista Roberto Navarro. Si gana a través de Scioli, el presidente le pondría punto final a 20 años de kirchnerismo. Se dice fácil. Pero solo se resuelve en el cuarto oscuro.


JAQUE MATE