Esta mañana, el Secretario Administrativo Financiero, Ricardo Coca, brindó detalles a Banda Ancha sobre la crítica situación que enfrenta la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) tras la suspensión de fondos por parte del Gobierno Nacional.

Según Coca, la UNSJ opera actualmente al 30% de su capacidad normal debido al ajuste nacional que ha eliminado por completo los fondos destinados al sector educativo. El secretario expresó su preocupación, afirmando: "Sufrimos un ahogo presupuestario que es inédito. Desde que trabajo aquí, no recuerdo algo de semejante magnitud".

En cuanto al presupuesto, Coca señaló que desde el año pasado no ha habido cambios mensuales, y actualmente, se mantienen con un presupuesto fijo de 150 millones. Esta cifra resulta alarmante considerando una inflación acumulada de más del 50% en lo que va del año. Coca destacó: "Estamos viviendo con lo mismo del año pasado, y debemos mantener cinco facultades, una escuela universitaria, más todas las escuelas e institutos".

Las consecuencias de este funcionamiento acotado ya se hacen sentir, con la imposibilidad de congelar precios en otros sectores y la necesidad de sostener beneficios para la energía. Coca advirtió sobre la quita de subsidios en energía, que podría aumentar significativamente los costos de la universidad.

El secretario también mencionó restricciones en contratos de limpieza y seguridad, planteando la necesidad de reducir consumos y cambiar horarios para adaptarse a la nueva realidad financiera. Además, resaltó las dificultades para actividades en departamentos alejados, como Calingasta, Valle Fértil, Iglesia, y Jáchal.

En cuanto al aumento salarial, Coca indicó que, si bien es un tema presente, la prioridad recae en garantizar el funcionamiento básico de la UNSJ. "Vemos con preocupación la caída de la recaudación después del 120% de la recesión que genera un gran impacto en los ingresos", expresó, subrayando que esperan la reconsideración de los montos, especialmente en el área de funcionamiento. Coca concluyó advirtiendo que, sin ayuda del estado, los fondos solo alcanzarán hasta agosto o septiembre tomando la medida de emergencia del fondo anticíclico.