Dejó un par de sentencias la diputada provincial Graciela Seva este miércoles en Banda Ancha. Dijo por un lado -y con franqueza- que 'con la pandemia no se jode'. Y por el otro, consideró que 'no son tiempos para internas'. Una cosa tiene relación con la otra, claramente.

La legisladora justicialista integra la minoría partidaria que perdió con el uñaquismo en la compulsa de marzo de 2020, sobre el filo de la Fase 1. Su voto siempre estuvo alineado igualmente con el Poder Ejecutivo, más allá de las tensiones mejor o peor disimuladas. Consultada sobre el pedido de Cristina Fernández de Kirchner a la oposición, de dejar la vacunación y las medidas sanitarias fuera de la grieta, no pudo más que coincidir. A eso se refirió con aquello de que 'con la pandemia no se jode'.

Sergio Uñac planteó en noviembre del año pasado la inconveniencia de votar doblemente en 2021. Por eso propuso suspender por única vez las primarias abiertas simultáneas y obligatorias. Logró un respaldo importante de gobernadores y hasta algún guiño del presidente Alberto Fernández. Se presentó un proyecto de ley en el Congreso, en este sentido. Pero quedó archivado en algún cajón. El Frente de Todos es tan diverso y tiene tantas realidades según el distrito, que prefirió contar con esa herramienta electoral.

Ahora el 24 de julio, en poquito más de un mes, habrá que presentar precandidaturas en la Justicia Federal. Por lo tanto, el plazo final está corriendo. Son días de definición política, aunque las urgencias de la gente pasan por otro lado, con la Salud, la Economía y la Educación puestas en crisis.

El oficialismo deberá darse una larga conversación interna. Hay matices, diferencias. El reparto 70/30 resultante de marzo del año pasado sigue ahí. Lo planteó la semana pasada el diputado Leonardo Gioja, compañero de bloque de Graciela Seva.

Al no prosperar la suspensión de las PASO, Uñac lanzó la propuesta de jugar con varias listas. Toda una novedad en el oficialismo, que hasta ahora siempre apostó por la unidad en elecciones legislativas de  mitad de mandato. Disponer un menú de alternativas permitiría dejar conformes a todos los que quieran competir. Y le pondría un poquito de pimienta a la compulsa para captar la atención de los votantes.

Pero salir a la calle a entusiasmar a la gente con una definición de carácter partidario, será difícil para cualquiera, sea oficialista u opositor. Las familias están en otra sintonía, con la angustia puesta en el día a día. En los números de contagios, en la administración de los recursos diarios frente a una inflación galopante, en la resolución de mandar o no a los hijos a clases presenciales. Para los que tienen la responsabilidad de gestionar, este es un dato ineludible.

Hay una cantera de candidatos y candidatas a disposición de Uñac. Suenan con cierta intensidad el actual diputado nacional Walberto Allende y las ministras Fabiola Aubone, Marisa López y hasta Alejandra Venerando. Pero también la actual legisladora pocitana Marcela Monti. De todas formas, ninguno ha salido de boca del gobernador. Son todas hipótesis. Además, está la relación interna con el giojismo: ¿habrá acuerdo o se resolverá en las urnas otra vez? Y el bloquismo. Los sindicatos de las 62 Organizaciones y la CGT. Y el resto de los sectores asociados al nutrido Frente de Todos. Trasladarle esta madeja a los votantes a partir de agosto, cuando comenzará la campaña, será interesante de mirar.

En la oposición también se cuecen habas. El Frente con Vos suma tensiones internas que van aflorando en la medida en que pasan las semanas. Rodolfo Colombo quiere y no lo oculta. El macrista Eduardo Cáceres tiene un procesamiento por la denuncia de Gimena Martinazzo, pero está apelado y a esta altura no se podría descartar que intentara repetir otra vez. Marcelo Orrego tiene la pelota pisada mientras Produccion y Trabajo pide un nombre propio. Una mujer posiblemente. Esta discusión anticipa además algunas cuestiones de 2023.

La tercera fuerza es Consenso Ischigualasto. Tendieron líneas con Juntos por el Cambio a nivel nacional pero no ha prosperado su intento de unirse con el Frente con Vos. También hay ruidos, porque convive una gran diversidad en su interior. La sola mención de una lista en borrador, integrada por el líder de ADN, Martín Turcumán, la cruzadista Adriana Aguirre y el abogado del GEN, Marcelo Arancibia, provocó una convulsión interna por los que se sintieron afuera del armado.

El 24 de julio será momento de inscribir listas y no habrá marcha atrás. En agosto habrá campaña, en plena convivencia con el Covid 19. Por supuesto que la gestión de la pandemia será motivo de debate. El éxito o el fracaso de la vacunación será argumento para presentar. Pero también la economía y la educación. Uñac apostará por provincializar. La oposición, por el contrario, aprovechará la caída de la imagen presidencial.

Frente a este desafío, el oficialismo tendrá la alternativa de abroquelarse para defenderse y defender al modelo nacional a capa y espada, o dedicarle energía a la pelea interna. Puntos suspensivos.


JAQUE MATE