Terminó la semana hábil y llegaron los festejos patrios sin el pronunciamiento de la Corte Suprema de Justicia de la Nación acerca del comicio suspendido en San Juan. Durante los brevísimos tres días de actividad administrativa hubo fuertes rumores acerca de un fallo inminente que le pusiera final a la incertidumbre. Pero no sucedió. Sin embargo, mientras el máximo tribunal mantiene pisada la elección hay al menos tres certezas para entender lo que viene.

El análisis se desprende de las declaraciones de Marcelo Espósito, apoderado del Frente San Juan por Todos y figura muy cercana al gobernador Sergio Uñac en materia electoral. Este miércoles pasó por Banda Ancha y dejó una serie de definiciones que permiten echar algo de luz como paliativo al silencio de los cortesanos Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda.

Lo primero es recordar que el 9 de mayo los tres altos magistrados por unanimidad emitieron un fallo cautelar que paralizó la elección únicamente para la categoría de gobernador y vice. Se pudo votar el resto de las categorías, incluyendo diputados proporcionales, diputados departamentales, intendentes y concejales, en un comicio sin precedentes. Quedó pendiente la cuestión de fondo, es decir, si Uñac puede o no puede ser candidato de acuerdo a la interpretación del artículo 175 de la Constitución Provincial.

La Corte Suprema pidió los antecedentes y recibió el descargo de la Fiscalía de Estado. Rechazó una recusación por prejuzgamiento y le mandó el expediente a la Procuración General para que emita dictamen. Será una formalidad, porque lo que diga el procurador no tendrá carácter vinculante. Los cortesanos podrían ya tener posición tomada y hasta el fallo escrito. Pero hasta tanto hagan oficial la decisión persistirá el cono de incertidumbre.

'Uno no come vidrio y puede entender que hay indicios en contra', reconoció Espósito. Nadie espera un fallo favorable a Uñac, ni en el oficialismo ni en la oposición. Pero hasta que no suceda, será un dibujo en el aire. Hecha la salvedad, hay al menos tres certezas que permiten figurarse el escenario que enfrentan los sanjuaninos y las sanjuaninas ante esta situación extraordinaria.

1- Uñac irá a la Corte Interamericana de Derechos Humanos pero eso no provocará ninguna interferencia en el proceso electoral. Descontando que la Corte Suprema le impedirá ser candidato a gobernador, acudirá a una instancia superior en San José de Costa Rica. 

Argumentará que le impidieron defenderse porque nunca fue parte del proceso. Dirá que se vulneró su derecho político en su calidad de ciudadano. Pero este reclamo a escala continental no detendrá el calendario una vez que se retome. La tramitación seguramente excederá las urgencias sanjuaninas. Quedará como antecedente jurisprudencial el día que termine.

2- Uñac no firmará un nuevo decreto. La nueva fecha de las elecciones para gobernador y vice dependerá del Tribunal Electoral Provincial. Esto se explica en que el proceso ya comenzó y fue paralizado circunstancial y parcialmente. Por lo tanto, cuando la Corte Suprema resuelva la cuestión de fondo y levante la suspensión, la autoridad electoral sanjuanina tendrá que estimar el tiempo necesario para acomodar la logística: compra de urnas nuevas, reimpresión de padrones y boletas, a modo de ejemplo. 

De acuerdo a este nuevo cálculo habrá día de votación. Todo se activará recién el día que se pronuncien los cortesanos. Algunos plantearon esta semana que la fecha tentativa sería algún domingo de julio. Es probable. Pero sigue siendo un pronóstico muy precario.

3- Se puede bajar cualquiera de los 9 confirmados. De las 10 fórmulas para gobernador y vice que oficializó el Tribunal Electoral Provincial, una sola quedó en la cuerda floja tras la intervención de la Corte Suprema: la de Sergio Uñac y Cristian Andino. Las restantes están plenamente habilitadas, sin ninguna objeción. 

Sin embargo, cayeron en la ola de rumoraciones. Espósito confirmó que cualquiera de ellos podría declinar su postulación hasta el día previo al comicio, porque no se puede obligar a nadie a que compita. ¿Qué razones tendría un dirigente para resignar su participación? Todas de índole político.

La primera y más evidente es que el próximo 24 de junio habrá que presentar listas para senadores y diputados del Congreso. Podría algún candidato a gobernador o a vicegobernador inscribirse en simultáneo, para competir en lo provincial y también en lo nacional. Pero la doble candidatura nunca será fácil de defender ante la ciudadanía. Siempre será equivalente a jugar a dos puntas. La alternativa sería bajarse de la carrera por la gobernación para anotarse en la parlamentaria. Cada espacio deberá darse ese debate interno.

La segunda razón para bajarse de la candidatura a gobernador sería valorar los votos obtenidos el 14 de mayo. Si bien no se pudo votar por la máxima categoría, los puntos acumulados para diputados e intendentes fueron indicativos del lugar que cada uno ocupa en la preferencia de la gente. El escrutinio ubicó a algunos con alta expectativa y a otros, con ninguna posibilidad. Sin embargo la sumatoria que impone la Ley de Lemas hace que ningún aporte sea despreciable. Nuevamente, cada espacio deberá darse ese debate interno.

Apenas tres certezas en un mar de incertidumbre, mientras la Corte Suprema mantiene pisada la elección sanjuanina. El cómo empieza a clarificarse. Solo falta conocer el cuándo.


JAQUE MATE