El gobernador Sergio Uñac se expresó este sábado por primera vez sobre el conflicto entre la UTA y ATAP que mantiene a toda la provincia por segundo día consecutivo sin servicio de transporte público de pasajeros. Dijo que será 'implacable' y que aplicará 'todas las sanciones correspondientes', porque la protesta ha afectado a miles de personas que se vieron imposibilitadas de llegar a destino. Incluidos algunos trabajadores esenciales para el combate de la pandemia.

'Este es un problema entre gremios y empresarios, en el que los únicos perjudicados son los usuarios de transporte, los sanjuaninos que no merecen ser rehenes de esta situación, es una irresponsabilidad', dijo Uñac en declaraciones citadas por Diario de Cuyo.

'Desde el Gobierno se han hecho los máximos esfuerzos para que acuerden, pero no han tenido en cuenta el perjuicio que generan en la población, todos aquellos que no pueden llegar a sus lugares de trabajo', agregó el gobernador. 

Y concluyó con una dura advertencia: 'voy a ser implacable y aplicaremos todas las sanciones correspondientes establecidas por la Subsecretaría de Trabajo'.

En efecto, la autoridad laboral emitió una resolución el viernes al mediodía en la que declaró la ilegalidad de la medida de fuerza y ordenó la restitución inmediata del servicio. Además rechazó el recurso de la UTA en que el sindicato desconocía a la Subsecretaría de Trabajo. Dispuso también la aplicación de multa al gremio por su accionar. Y estableció una audiencia de conciliación para el lunes 8 de febrero por la mañana.

Sin embargo, luego de conocida la resolución, el gremio sostuvo su postura. Ratificó el paro y continuó desoyendo a la Subsecretaría de Trabajo, por entender que no tiene competencia para regular este conflicto.

La controversia surgió por la demora en el pago de salarios correspondientes a enero, que debían pagarse hasta el 4 de febrero. Como las empresas hasta ese día solo habían pagado el 30 por ciento de los haberes, la UTA resolvió ir al paro por tiempo indeterminado hasta que se complete el 100 por ciento de los sueldos.

La medida resultó desproporcionada, habida cuenta de que no se adeudan otros conceptos y las empresas argumentaron dificultades financieras en el inicio del año. El derecho a la huelga es inherente a los trabajadores, pero habitualmente los sindicatos la aplican con gradualidad, parando al principio por bandas horarias, luego por 24 horas, luego por 48 y por 72. Recién después de ese proceso, cuando no hay una respuesta positiva de la contraparte, se llega al extremo del paro por tiempo indeterminado. 

En esta ocasión la UTA optó por saltarse todas las instancias previas, lo cual llamó la atención en gobierno, donde altas fuentes dijeron off the record que habría una interna sindical en el medio, que estaría complicando la negociación.