“No esperábamos esta situación de la lluvia, esta vez colapsó todo, ha llovido más”, lamentó Leopoldo Soler, el intendente de Ullum. El mandatario municipal explicó a qué se debe el desastre que las tormentas provocan en el departamento.

Según Soler, las lluvias pusieron de manifiesto un problema que el departamento arrastra desde hace más de un año que tiene que ver con los drenes aluviales. Con el crecimiento de los emprendimientos agrícolas desviaron todas las crecientes a una sola calle, que es la Pedro Giménez.

Como la calle está preparada para conducir el drene fluvial en caso de tormenta, los productores condujeron todo el agua, por lo que nunca se terminó de hacer  el drene. Así se inundó. “Lo cierto es que esto es una deuda histórica, nunca se terminó esta obra”, confesó el intendente.

“Siempre termina drenándose en la comunidad. Ha arrasado con casas, muchísima gente evacuada”, añadió y sostuvo que “hay muchos vecinos preocupados y algunos cortaron la ruta por un tema que es imposible resolver de inmediato”.

A su vez, apuntó contra los “pícaros” que “están buscando que les den una casa”. “Viene muchísima gente a ocupar terrenos, se asientan en lugares en donde es el lecho del río, a orillas del dique, esta gente sufre inundaciones porque hay muchas casas precarias”, explicó.

En Ullum hay 102 personas evacuadas por las tormenta que no han sido trasladadas a un lugar determinado, sino que “se las han rebuscado entre familiares y amigos hasta tanto sepamos resolverlo”, dijo Soler. Asimismo, señaló que desde el municipio están en “relación permanente” con Defensa Civil.