¿Papá después de los 40? Los pro y los contra de ser un padre “añoso”
En TardeTrece charlamos con la psicóloga Silvana Royon, quien señaló que las proyecciones de vida se han ampliado muchoo gracias a los avances en ciencia y muchas personas postergan el deseo de tener hijos.
El presidente Alberto Fernández y la primera dama Fabiola Yañez recibieron a su primer hijo, Francisco, en las primeras horas de este lunes. En TardeTrece charlamos con la psicóloga Silvana Royon, quien definió a la pareja presidencial como padres añosos, ya que ella tiene 40 y él tiene 63.
El caso de las madres mayores de 35 es más conocido y es un tema sobre el que la sociedad tiene más información, “las mujeres están informadas, pero poco sabemos sobre los hombres mayores que deciden tener un hijo”, manifestó la especialista que definió como padres añosos a los hombres mayores de 40, como en el caso de Alberto Fernández.
Al respecto señaló que las proyecciones de vida se han ampliado mucho gracias a los avances en ciencia y medicina, además de otros aspectos importantes como los sociales y biológicos, “es importante la alimentación saludable y ejercicios continuos, tener relaciones sociales sanas y mantener vínculos”, dijo Royon.
Años atrás las decisiones en cuanto a la paternidad se tomaban algunos años antes, en la juventud, “ahora lo que estamos viendo es un deseo de ir prolongando para más adelante la paternidad y la maternidad. Esto tiene que ver con que necesitamos terminar nuestros estudios, establecernos acomodarnos económicamente o hacer un viaje”.
Pero, ¿es bueno o es malo tener un hijo a esa edad? “Lo que se dice desde la salud es que mientras nos cuidemos y hagamos una vida saludable esto está bien”, respondió la psicóloga.
Sin embargo hay cosas que hay que tener en cuenta, “algunos estudios dicen que esto puede traer algunas repercusiones sobre la salud del niño, hay mayor riesgos de enfermedades y en el desarrollo, de enfermedades mentales, por el cambio en los cromosomas”, explicó la entrevistada.
Por otro lado, las ventajas de ser un padre añoso que es más probable que sean personas más estables, más tranquilas y acomodadas económicamente y educacionalmente. “Hay muchos estudios que demuestran que los hijos de padres añosos no tienen alteraciones conductuales”, finalizó.