Gonzalo Campos, presidente de la empresa de cannabis de San Juan CANME, compartió en Banda Ancha la situación actual y los desafíos que enfrenta la compañía. "Encontramos la empresa con algunas asignaturas pendientes", señaló Campos, haciendo referencia a varias falencias que están trabajando para resolver. "

Administrativamente está ordenada, pero financieramente no estaba de esa manera debido a deudas con inversores privados, que estamos en proceso de resolver", explicó.

Campos destacó la necesidad de una inversión significativa para avanzar con los objetivos de la empresa. "Se necesita una inversión de 318 mil dólares", afirmó. Esta inversión es crucial para superar los obstáculos financieros y avanzar hacia la comercialización del aceite cannábico, un objetivo prioritario para Campos y su equipo.

Uno de los principales problemas que enfrenta la empresa es la falta de una licencia para comercializar sus productos. "Existía una agencia que regulaba la licencia, pero está desarticulada y desmantelada, sin directores ni decisiones", explicó Campos. Esta situación ha generado serios problemas para la empresa, que actualmente sólo tiene una licencia de investigación y cultivo, pero no de comercialización.

Para resolver esta situación, la empresa ha tomado medidas legales. "Hemos presentado un amparo por mora que está a punto de vencer el plazo de contestación del organismo superior, el Ministerio de Economía", indicó Campos. El objetivo de este recurso es permitir que el gobierno provincial pueda comercializar el producto dentro del ámbito local, lo que ofrecería un respiro tanto a la empresa como a los inversores privados.

Campos también subrayó la importancia del aceite cannábico para la salud pública. "Estamos produciendo para asignar las partidas necesarias para la Dirección de Farmacia del Ministerio de Salud, específicamente para tratar la epilepsia refractaria", dijo. Anteriormente, el Estado debía comprar estos medicamentos a laboratorios específicos, pero ahora la empresa local está en posición de suministrar el producto, mejorando la calidad de vida de los pacientes.

"El paso 1 es tener materializado este aceite de cannabis y colocarlo en farmacias", afirmó Campos. 

Campos explicó que la venta de entre 3,000 y 3,200 goteros de aceite de cannabis por mes permitiría autosustentar los costos fijos de la empresa, incluyendo el personal administrativo. "Esto representaría un respiro y oxígeno tanto para la parte privada como para nosotros en particular", señaló.

Además de la comercialización, la empresa está trabajando en la refuncionalización de su laboratorio de producción. "Hemos tenido dos reuniones virtuales con la ANMAT y presentamos el proyecto de refuncionalización del laboratorio", indicó Campos. La empresa cuenta con dos laboratorios: uno de control de calidad en el INTA y otro de producción en una ubicación distinta. La refuncionalización requerirá una gran inversión para ampliar el espacio físico y mejorar la tecnología, especialmente el sistema de filtración de aire.