'Quiero volver a lo mío, esto es lo que más me apasiona, ser bombero voluntario', dijo Alexis Juárez frente al móvil de Canal 13, el mismo hombre que hace algunos días estaba peleando por su vida en una camilla tras sufrir un grave accidente. Sin importarle lo que le sucedió, con lo único que sueña es con volver a subirse a alguna movilidad para colaborar con toda la gente que necesite ayuda frente a un incendio. Sin dudas el sanjuanino encontró su vocación, la razón por la que llegó a este mundo. 

Uno de los capítulos más difíciles de la vida de Alexis se dio el pasado miércoles 6 de junio. En ese momento este bombero voluntario estaba viajando en una movilidad junto a sus compañeros para ayudar a extinguir un incendio en Carpintería. Sin embargo, el hombre nunca llegó a destino y la razón fue más que lamentable.

'Por lo poquito que me han contado, yo iba arriba del móvil y me intoxiqué por el humo. Ahí me he desmayado, me he resbalado y he pegado la cabeza contra el piso. Desde ahí no me acuerdo más nada', contó este héroe sin capa que lleva más de 5 años entregándose a las necesidades de la comunidad.

Alexis, el bombero accidentado, ni siquiera considera dejar de ayudar a la gente

Frente a ese terrible accidente sus compañeros avisaron a las autoridades y una ambulancia lo trasladó hasta el hospital Rawson. Allí el afectado llegó con pérdida de conocimiento. En ese momento los especialistas que lo atendieron determinaron que había sufrido una seria lesión en su cráneo, al haber golpeado fuertemente contra el asfalto.

'Cuando desperté en el hospital me habían puesto un drenaje porque tenía hematomas en la cabeza. El cerebro se me había corrido para el lado izquierdo por los hematomas. Si no me ponían los drenajes, iba a quedar paralizado del lado izquierdo. Gracias a eso acá la estoy contando', expresó.

Por más que los pronósticos médicos no eran alentadores para él en un principio, Alexis sacó a relucir la fuerza interna que caracteriza a todos los bomberos voluntarios. Comenzó a pelear una lucha interna para recuperarse y poder volver a ayudar a la comunidad, la pasión que lo motiva a levantarse día a día.

Alexis, el bombero accidentado, ni siquiera considera dejar de ayudar a la gente

Con el paso de las horas y de los días Alexis comenzaba a recuperarse de manera milagrosa. Los drenajes comenzaban a hacer efecto y el riesgo de que quedara paralizado era cada vez menor. Su evolución fue tan favorable que pocas jornadas después de haber sufrido este grave siniestro, pudo volver a su casa para ponerse al cuidado de sus seres queridos.

'La voy llevando bien, voy a las manos de mis sobrinos, de mi hermana y mis compañeros que me vienen a ver. Ellos están permanente conmigo. Vino mucha gente, faltan algunos pero no espero que vengan todos. En la mano de ellos voy bien, más las oraciones que ha hecho otra gente conocida fuera del cuartel, la voy llevando bien', aseguró.

Lejos de padecer esta recuperación en su hogar, Juárez se propuso día a día dar un nuevo paso que lo acerque a su reincorporación a los Bomberos Voluntarios de Pocito. Por ejemplo, durante la mañana de este miércoles, pudo caminar por sus propios medios algunos metros sin que nadie lo asista.

'Esta mañana le dije a mi sobrino que me ayudara a ir al baño pero terminé yendo sólo, tranquilo y despacito. Unos compañeros me trajeron unas muletas pero no las logro controlar. Casi me caigo dos veces así que elegí ir caminando tranquilo', relató con gran felicidad.

Alexis, el bombero accidentado, ni siquiera considera dejar de ayudar a la gente

La voluntad de Alexis es admirable. Lejos de estar asustado por lo que le ocurrió, no dudó un segundo cuando le consultaron si quería volver a su trabajo. Alexis encontró en los Bomberos Voluntarios de Pocito su lugar en el mundo. Un sitio donde se siente útil. Donde no saber leer ni escribir no lo limita para estar a la par de sus compañeros. No caben dudas de que este hombre tiene una historia digna de ser contada y en acciones como estas demuestra por qué es un ejemplo a seguir.

'Hace 5 años iba para la plaza a buscar a mi sobrina que salía de la escuela y ellos estaban entrenando. Me arrimé a mi jefe que es Agustín Moya y le pregunté. Me gustó pero nunca le dijeron a mi jefe que no sabía leer ni escribir. Después él se enteró pero me dejó seguir y acá estoy. Tengo ganas de volver. Quiero volver a lo mío, es lo que me gusta, esto es lo que más me apasiona, ser bombero voluntario', sentenció este luchador de la vida.