Alquiler familiar: la pesadilla inmobiliaria
Migraciones por precio, ley de alquileres y contratos desinflados. Los alquieres familiares se convirtieron en el dolor de cabeza del negocio inmobiliario.
La inflación se fue comiendo sectores de la economía y algunos quedaron tambaleando. Uno de estos casos es el negocio inmobiliario. Con una ley de alquileres avanzadas y un marco inflacionario incalculable a mediano plazo, el sector se resintió bastante sobre todo en cuanto a los alquileres de viviendas de tipo familiar. Así lo comentó Mauricio Turell, presidente de la Cámara Inmobiliaria de San Juan en Banda Ancha.
"El rubro está bastante flojo porque es imposible armar un negocio para adelante. El gran problema es la vivienda familiar, porque la inflación es muy alta y excede a lo que especifica en el contrato, entonces se hace muy difícil ajustar después porque la gente termina por rescindirlo", comentó Turell. Pero este es solo parte de la tormenta, porque para el presidente de la Cámara aún falta algo más complicado: la ley de alquileres.
"El tema de esta ley es que no quedan garantías para el propietario. Si vamos a la letra chica, dice que el inquilino tiene posibilidad de rescindir el contrato con 3 meses de anticipación e inmediatamente el locador debe entregar el depósito. El tema es cuando vienen la facturación de los servicios luego, ahí el propietario va a tener que hacerse cargo con su dinero, no tiene lógica", destacó.
Finalmente, Turell señaló que la inflación y los alquileres con precios elevados llevaron a muchos inquilinos a "movilizarse a otros más baratos e, incluso, a la casa de sus padres o parientes para abaratar el costo".
Ya, a esta altura, los comercios son otro problema, pero la piedra en el zapato es la vivienda familiar.