Ariel Peñafort, como muchos otros, usó las redes sociales para dar inicio a la búsqueda de sus orígenes. El hombre de 35 años hace 4 meses dio cuenta que necesitaba cerrar círculos y por ello decidió buscar a su mamá bilógica. Según pudo saber, ella es de apellido Reinoso y lo dio en adopción en Villa San Damián. 

De acuerdo con lo que relató en Diario 13, a los 26 años conoció su verdadero vínculo con los Peñafort. Lejos de enojarse sintió un alivió y un enorme agradecimiento a su familia adoptiva por darle la oportunidad de un vida plena, como la que vivió.  

"Mi mamá me contó que era adoptado a los 26 años. La verdad es que no me sentí mal con la noticia, sino que agradecí a Dios por llevarme a una familia que me amó y me supo contener en todo. Por eso estoy súper agradecido con ellos", expresó Ariel. En su búsqueda, Ariel descubrió que su madre biológica se llama Rosa Reinoso y que fue dado en adopción en Villa San Damián. El impulso para iniciar esta búsqueda surgió en agosto, cuando junto con su madre y hermana fueron a visitar la tumba de su padre adoptivo.  Allí, él sintió que estaba preparado para embarcarse en la búsqueda de su origen y así conocer a quien lo dio a luz. 

A través de la ayuda de una señora llamada Isabel, quien fue intermediaria y  conocía a su madre biológica, pudo saber que Rosa  no podía cuidarlo, Ariel fue llevado a la villa San Damián por sus padrinos, en octubre de 1988.  Según la información proporcionada por un amigo de su padre adoptivo "mi papá biológico no quería saber nada de mi". Por lo que quizás ello motivo a Reinoso en darlo en adopción a una familia que le diera todo su amor.

Ariel comentó en este medio que su mamá le dio pocos datos, pero todos los que ella tenía. Uno de ellos es que Reinoso cuando fue a dejarlo también tenía otra pequeña. Además le dijeron que era muy joven la mujer. Sumado a ello, le aseveraron que tras darlo en adopción se mudó a Buenos Aires. 

A pesar de las circunstancias, Ariel destacó su agradecimiento por la excelente infancia y educación que recibió.  Además señaló una hermana cinco años menor, con quien mantiene una relación fraternal.  Al consultarle sobre que haría en un posible encuentro con su madre biológica, Ariel compartió: "Realmente no lo pensé nunca, a eso. Serían muchas emociones juntas, pero creo que comenzaría con un 'Hola, Rosa, ¿cómo estás?'. La estuve buscando para agradecerle porque llegué a una buena familia que me dio mucho amor".

Ariel enfatizó que "no le reclamaría nada" a su madre biológica y que "no conozco las circunstancias que la llevaron a tomar la decisión de darme en adopción." Sin embargo, tiene una curiosidad genuina y le gustaría saber si tiene otros hermanos. Según la información que le han proporcionado, tendría una hermana que es ocho o nueve años mayor que él.