San Juan da inicio a la Semana de la Olivicultura, un evento que celebra la riqueza y diversidad de la producción olivícola.  La iniciativa cuenta con la participación de la Asociación Sanjuanina de Olivicultores y destacó la importancia del sommelier de olivas, quienes charlaron con el móvil de Canal 13.

Para convertirse en sommelier de olivas, se requiere un arduo proceso de formación que puede durar entre dos y tres años. La carrera incluye estudios en instituciones como la Universidad Católica de Cuyo, donde los aspirantes adquieren conocimientos técnicos y prácticos sobre la degustación y evaluación de aceitunas y aceite de oliva.

Los sommeliers de aceitunas deben desarrollar habilidades específicas para identificar la calidad del fruto. Entre los aspectos clave a evaluar se encuentran:
1. Textura: La aceituna debe ser crujiente al morderla y el carozo debe desprenderse fácilmente.
2. Color y turgencia: La aceituna debe tener un buen color, sin manchas, y una turgencia adecuada. A medida que madura, la aceituna se oscurece, convirtiéndose eventualmente en aceituna negra.
3. Variedades: Existen muchas varietales de aceitunas, cada una con características distintivas que los sommeliers deben aprender a reconocer.

En el caso del aceite de oliva, la cata se centra en el olfato y el gusto. Los sommeliers deben identificar la intensidad y los defectos del aceite. Es fundamental que el aceite de oliva se conserve adecuadamente para mantener sus propiedades señalaron que no debe guardarse en la heladera. La temperatura ideal es de aproximadamente 10 grados, en un lugar oscuro y a temperatura ambiente.