Delicada y urgente es la situación por la que atraviesa una familia sanjuanina. Su hijo, Alex, de tan solo 8 meses, luego de estar internado más de 4 meses en el Hospital Garrahan fue diagnosticado con Trastorno de Glicina, una enfermedad que en la actualidad no tiene cura. Por lo que al contar con el diagnostico, el bebé y sus jóvenes padres necesitan volver urgente a San Juan. El problema es que solo pueden hacerlo en un vuelo sanitario, pero desde Gobierno les dijeron que el avión de la provincia está roto, por lo que están a la espera, según contó a Diario 13, Ivanna Rodríguez, mamá del niño.

La joven mamá realizó una publicación en su cuenta de Facebook buscando que se viralice la situación de su familia. ‘Nuestro objetivo es que nuestra situación le llegue al gobernador y que consiga el avión así podemos volver’, precisó.  Sucede que Alex y sus padres no pueden volver a la provincia en un vuelo comercial, debido a su delicado estado de salud.

La joven familia está en Buenos Aires desde noviembre, cuando lograron llevar al niño en el avión de la provincia. En esa oportunidad, Ivana también realizó una publicación en Facebook donde contó que su hijo necesitaba ser trasladado de urgencia al Garrahan. Ahora necesitan nuevamente del avión sanitario y, por eso recurrió nuevamente a una publicación, buscando que se viralice la situación.

Con su hijo en enfermo quedaron varados en Buenos Aires porque no está el avión sanitario

Ivana y su pareja, el padre de Alex, están viviendo desde que llegaron a Buenos Aires en un hotel, ubicado a pocas cuadras del famoso hospital. Por mes, alojarse les cuesta más de $300 mil. Afortunadamente para ellos, cuentan con la ayuda de Desarrollo Humano, Casa de San Juan en Buenos Aires y lo que les pueden mandar sus familias.

‘Hace mucho tiempo que estamos acá. Mi hijo ya cuenta con el diagnóstico, por lo que ya podemos volver a nuestras casas. Lo que necesitamos con urgencia es volver a ver a nuestras familias y seres queridos. Queremos que compartan con Alex, que lo vean bien. Nuestro miedo es que mi bebé se ponga mal y mi familia no pueda verlo. A él le dan convulsiones todos los días, algunas duran hasta 1 hora, por lo que tenemos que estar todo el tiempo con él, ya que al ser tan pequeño todavía no balbucea’, contó la joven mamá.

Ivana contó que ella tuvo que renunciar a la carrera que estaba estudiando para dedicarse a su hijo. Su pareja tuvo que renunciar al trabajo, por lo que ninguno cuenta con obra social. Esto es un gran problema para ellos, puesto que, Alex solo puede tomar una clase de leche por sus convulsiones, la cual, hacen dos meses, tenía un costo de $2 millones el tarro. ‘Nosotros no contamos con el pasar económico para comprarle la leche a mi bebé’, explicó.