La situación de un grupo de empleados de la empresa Lomas del Sol es crítica. En el duro contexto económico del país, que agudizo la cuarentena por el coronavirus, se les sumó, en su caso, que la empresa en la que trabajaban los despidió de un día para el otro, sin mediar palabra, ni explicación alguna.

Jonathan Miranda, uno de los trabajadores damnificados, le contó a Canal 13 como se dio el despido masivo por parte de la empresa, ubicada en Albardón, dedicada a la elaboración de distintos comestibles como arroz, pasas, cereales, aceites.

El joven aseguró que ningún de ellos sabe el motivo del despido aun, ya que la empresa no se los comunicó. "Nos dijeron que nos teníamos que presentar tal día, nos presentamos, pero al llegar a nuestras casas nos había llegado el telegrama, que acusaba falta de trabajo”  relató.

Jonathan afirmó que tanto el, como sus compañeros, 20 personas en total, se presentaron en la planta al día siguiente y todos los días hasta la fecha, con la intención de trabajar, pero en ninguna oportunidad los dejaron entrar. “Nos decían siempre lo mismo, que ya nos iban a avisar”

Algo que agrava más la situación, es que a ninguno de los empleados los indemnizaron, algunos de ellos, según comentó uno de los damnificados, llevan mucho tiempo trabajando para la empresa, por lo que la deuda sería mayor. Tampoco les depositaron el último sueldo, a 20 días de la fecha de cobro. Pero lo que más le llama la atención a estos trabajadores, es que aún figuran en ANSES como activos.

  “Estamos sobreviviendo con changas” contó apenado Jonathan, que dijo ver muy complicada que la empresa los reincorpore a sus puestos de trabajo, pero quieren que les liquiden los suledos y los indemnicen, “para poder afrontar estos días difíciles sin poder trabajar”, en donde se hace el doble de difícil conseguir empleo por el contexto de cuarentena.

Por último, Jonathan afirmó que realizaron exposiciones a  la policía para asentar que fueron a trabajar, pero desde la empresa niegan que los trabajadores se hayan presentado a sus puestos de trabajo. Los ex empleados de esta empresa confían en la mediación por parte de la Subsecretaria de trabajo, mientras tanto buscan “la moneda” día a día, con changas para poder seguir alimentando a sus familias.