Don Carmelo es una Reserva Natural Privada con categoría de Reserva de Uso Múltiple. Su objetivo es conservar muestras de las comunidades del Distrito Cuyano de la Provincia Altoandina y de la Provincia Puneña. También se busca privilegiar la convivencia armónica entre las actividades productivas antrópicas y el mantenimiento de los ambientes naturales con sus recursos silvestres.

Su propietario, Arturo Curátola nombró a ésta reserva como Don Carmelo en honor a su abuelo, un inmigrante italiano que llegó a nuestro país en 1918. Esta familia decidió comprar el terreno en 1992 con el objetivo de proteger la flora y la fauna, y un año después fue declarada como reserva natural privada. Hasta ése entonces, el territorio fue un punto de concentración de cazadores.

De una belleza única, ésta área protegida se encuentra a 130 km al oeste de la ciudad capital, justo en el límite entre el departamento Ullum y Calingasta. Tiene una superficie de 40 mil hectáreas que sirven como fuente de investigación para instituciones nacionales e internacionales.

El área presta sus instalaciones gratuitamente para que los alumnos de la Universidad Nacional de San Juan realicen sus múltiples estudios. También, por las impresionantes vistas panorámicas, cuenta con un uso turístico de poco tiempo en el año. En esta zona protegida habitan varias especies en distinto grado de amenaza como el suri cordillerano, el cóndor andino, el águila mora, el halcón peregrino, el puma, el chinchillón y el guanaco.

La vegetación del territorio se caracteriza por la presencia de elementos de las ecorregiones del monte y la puna, junto con algunas especies altoandinas. Dominan el paisaje los matorrales abiertos y el pastizal de coirones. También hallamos las denominadas “vegas”, que son pequeños oasis, donde el suelo se encuentra saturado de agua y la vegetación es formada por especies pigmeas, como rimatozas, que forman un denso tapiz.