En los últimos días, se conoció a través de las redes sociales el caso de Shirlei Flores. La joven de 22 años es mamá de 4 hijos, vive en extrema pobreza y está a punto de recibirse de Policía. Su historia conmovió a cientos de personas que se acercaron a ayudarla.  

Este lunes, la chica recibió la donación de un teléfono celular para poder continuar con las clases virtuales de la carrera y brindó su testimonio ante Canal 13. “Nuestra situación es difícil, tratamos de salir adelante. Mi marido sale a trabajar cuando lo vienen a buscar. Y sino, vendemos leña en un carrito entre los dos y así vamos sacando el día a día”, contó la joven mamá.

Sin embargo, el poco dinero que recaudan no alcanza para vivir. La joven vive con su pareja y tres de sus hijos en una vivienda muy precaria de dos habitaciones. Las carencias de la familia son imperiosas. El lugar no cuenta con servicios básicos como luz, agua y gas. Incluso cocinan a leña fuera de la casa porque no tienen cocina. “Con la venta de leña hacemos entre $800 a $1200 y con eso cargamos la SUBE para ir a la escuela, para comer, los gastos del día a día. A veces la venta no va bien y no se vende. Como están las cosas, la gente no pueden comprar, pero tratamos de salir adelante con lo que tenemos”, dijo José Villegas, pareja de Shirlei.

Shirlei, contó que comúnmente viaja en colectivo hasta la Escuela de Policías. A veces no tiene dinero para cargar la SUBE y sus compañeros la ayudan. “No tengo la SUBE con descuento y me gasto mucho en pasajes. A veces no tenía o me iba con lo justo y mis compañeros de acá del departamento me ayudaban. A veces tenía que hacer guardias de noche y no llevaba nada para cenar y ellos también me convidaban”, contó la joven.

La mamá comentó que viven en dos piezas y a veces no tienen lugar, por lo tanto, cualquier ayuda es bienvenida. “A veces lo más complicado es la bebé que hay que tenerla alzada y eso, pero los demás niños están más grandes y algunas cosas saben hacerlas solos”, comentó.

El esfuerzo de la joven pese a la adversidad que atraviesa conmovió a cientos de personas que se movilizaron para poder ayudarla. Por la tarde del lunes, Matías Cepeda, un comerciante sanjuanino que organizó una campaña para conseguirle el teléfono que necesitaba, llegó con la ayuda.  

La joven agradeció el movimiento solidario y dijo que el aparato le permitirá poder acceder a internet y a los contenidos que necesita para poder estudiar. La cadete se encuentra en el último año de la carrera para ser oficial de Policía, espera poder terminar sus estudios a fin de año y luego un pronto nombramiento para comenzar a trabajar.

“La gente lo hizo por ayudar de corazón. Todo fue por las redes sociales y se movilizó mucha gente, de San Juan y hasta de Mendoza. Trajeron lo que todos podían de corazón y a nosotros nos sirve”, dijo el marido de Shirlei.

Paralelamente, algunos compañeros de la chica llevan a cabo una campaña para recaudar materiales de la construcción y construirle otra habitación a la familia.

La campaña solidaria para Shirlei continúa con el pedido de ropa de abrigo, calzado, frazadas, alimentos no perecederos y cualquier elemento que sea de ayuda para la familia. También se reciben donaciones de dinero para ayudar a la joven a cargar la tarjeta SUBE y poder viajar a la Escuela de Policías.