El hijo de españoles, que heredó el amor por la panadería
Diario 13 dialogó con el dueño de una de las panaderías mas antiguas de Chimbas. Con su equipo de trabajo, trabaja cada día desde la madrugada para que las panificaciones lleguen a los hogares.
Este viernes 4 de agosto, se celebró en Argentina el ´Día del Panadero´, por ello Diario 13 habló con el propietario de una clásica panadería de Chimbas, Francisco Rubia Almazán, ubicada en inmediaciones de avenida Benavidez y Tierney, quien nos contó detalles sobre sus mas de cincuenta años de trabajo.
La panadería surgió por iniciativa de los padres de Francisco, quienes eran de nacionalidad española. Todo resultó en medio de la crisis económica que atravesaba Argentina, en la década del 70 y desde su inicio en 1972, la familia de panaderos no dejó de trabajar según contó su dueño. Con sus clásicas rosetas, que les son pedidas a diario por sus clientes y otras panificaciones, hoy festeja su día.
Rubia indicó además que, lo que siempre motivó a su familia fue el servicio que brindaban a la comunidad desde su rol como panaderos. Y guarda en su corazón, aquellas veces en que los alumnos de las escuelas de la Villa San Patricio, los visitaban para conocer el proceso de la elaboración del pan.
"Eran pequeños de primer grado. Al finalizar, hacíamos un pequeño agasajo entre todos consumiendo los productos que habíamos elaborado", expresó Francisco.
De acuerdo a Rubia, a lo largo de los años la panadería, también padeció los desafíos que presentó la pandemia a los trabajadores. "La poca materia prima que llegaba y el día a día con el cliente fue un desafío para continuar trabajando durante la pandemia, nosotros tuvimos que tomar varias medidas para cuidarnos entre todos", explicó el panadero.
Mas adelante, el entrevistado compartió que desde hace unos años a la fecha, su local de panificación se tuvo que acomodar a las nuevas tecnologías para prevalecer en el tiempo y agilizar sus tiempos laborales. Por ejemplo, en lo que refiere a la maquinaria, la producción y hasta la eficiencia del servicio.
"A lo largo de estos 52 años hemos renovado varias maquinarias, que han simplificado y a la vez, multiplicado la producción de forma escalonada. Antes podíamos hacer 500kg de pan por día, pero con las últimas maquinarias que hemos adquirido podemos hacer 1200 kg por día", señaló el propietario Rubia.