Si existe alguna persona sumamente solicitada y a la que es muy complejo poder llegar es el Papa Francisco. Sin embargo el sumo pontífice la semana pasada se tomó unos minutos para recibir a una familia sanjuanina que lo sorprendió con un regalo.

Augusto Rago, presidente Convención Bloquista, fue uno de los afortunados que pudo reunirse con Jorge Bergoglio en el mismo Vaticano. El sanjuanino explicó que todo se pudo dar gracias a la intervención del esposo de una de sus hijas, el cuál tiene una gran relación con el Papa.

'Surge hace tiempo cuando Cristian, casado con mi hija Valeria, se convirtió en el vicepresidente de la Corporación Andina de Fomento. Él se entrevistó varias veces con Jorge Bergoglio porque él pertenecía a Cáritas en Buenos Aires y tenían una relación de mucho afecto. Apenas lo designaron, inmediatamente se trasladó con mi hija y mis tres nietas. Lo saludaron y estuvieron con él. La relación se ha ido manteniendo. Esto viene porque CAF financia parte de los proyectos de Escuelas Ocurrentes que ha sido una fundación generada en Buenos Aires por Jorge Bergoglio', relató.

Este programa llamado 'Escuelas Ocurrentes' tiene el objetivo de crear jóvenes lideres barreales. Justamente en ese contexto, la Corporación Andina de fomento se encargó de la realización de un encuentro en el que 50 de estos chicos dijeron presente en el Vaticano.

'La semana pasada CAF financió este encuentro que fue entre 50 líderes, 50 chicos. Esto se desarrolla dentro de la ciudad del Vaticano, en la Universidad Pontificia Urbanística y sobre todo en el Centro de Convenciones a donde el papa se trasladó el día jueves. Una vez que pasó delante de todos los chicos, se acercó a nosotros. Hubo tres audiencias personales que son muy cortas. Una fue con nuestra familia, otra con el presidente y vicepresidente de CAF y la tercera con Bono', expresó.

Una tradición que se ha mantenido por décadas, es llevarle algún presente al sumo pontífice y esta no fue la excepción. Rago le entregó a Su Santidad un cuadro de la Virgen María, el cual había pintado su propio padre. Se trata de un experimentado pintor de la provincia.

'Él se acercó, lo saludamos y le hice entrega de un cuadro pintado por mi padre, de la Virgen María. Él era uno de los estilos predilectos de San Juan. Pintaba en tinta china negra o en tinta china de color. También pintaba al óleo, acuarela y pastel. Hay cuadros en el Club Social, en la Casa España y en numerosas casas sanjuaninas. En esa oportunidad le conté que mi padre fue educador en la Patagonia profunda, en Esquel con los indios, después se trasladó a Chaco donde nació mi hermana, estuvo en Buenos Aires y finalmente recaló en San Juan donde ocupó un cargo equivalente al ministro de Educación', sentenció.