Si bien el fallecimiento de Diego Armando Maradona entristeció al mundo entero, también provocó que muchos amantes del fútbol recordaran gratos momentos que les hizo vivir este ídolo a través del fútbol. Esto le sucedió a Ricardo Rodríguez, un periodista deportivo sanjuanino, que tuvo la oportunidad de presenciar el último partido de esta leyenda vistiendo la camiseta de Boca Juniors.

En el año 1997 Ricardo Rodríguez trabajaba como corresponsal en San Juan del Diario Olé y del medio Clarín. Durante el mes de octubre las autoridades del primero de estos medios mencionados, tomaron la decisión de darles una capacitación a todos sus periodistas que vivieran en el interior del país.

"En ese momento trabajaba como corresponsal de deportes de Diario Olé y de Clarín, habíamos tenido una jornada de capacitación que se le brindaba a cada uno de los corresponsales. Me tocó viajar a Buenos Aires, yo en ese momento trabaja en la redacción de Diario de Cuyo, por lo tanto tenía la necesidad de aprender algunas cuestiones del formato de Olé, que comenzaba a germinar un diario deportivo", recordó Rodríguez.

Una vez que pisó suelo bonaerense, el sanjuanino se dirigió al lugar establecido para las capacitaciones que le iban a impartir. Luego de estar durante dos días adquiriendo valiosos conocimientos compartidos por profesionales en la materia, los propietarios de este medio tuvieron un gran gesto con los comunicadores que viajaron desde el interior del país.

"Como premio a todos los que habíamos ido del interior, nos llevaron a ver el partido de River y Boca en la cancha de River que justamente coincidió con que fue el último partido de Diego", rememoró el sanjuanino. Ese recuerdo quedó grabado a fuego en la mente de Rodríguez, ver al Monumental repleto de hinchas de ambas parcialidades.

Más allá del resultado del partido, que fue en favor del conjunto Xeneize, algo que nunca olvidará este periodista deportivo es ver como ambas tribunas dejaban su rivalidad de lado para unificarse en un sólido aplauso dedicado 100% a Diego Armando y su magia. "La admiración y la idolatría de las dos hinchadas, eso era lo que generaba Diego, que aún jugando River y Boca lo aplaudieran todos", sentenció.