Este martes, la Cooperadora de la Escuela de Enología denunció públicamente irregularidades en el manejo de fondos y el cobro ilegal de inscripciones en la institución pública, entre otras acusaciones, y la Dirección quedó en la mira. En ese sentido, a través de una conferencia de prensa con los medios y de una nota formal presentada al Ministerio de Educación y al Gobierno de la Provincia, los miembros de la entidad solicitaron que se comience a investigar el accionar de las autoridades del establecimiento. 

Pese a la gravedad de las acusaciones, desde la Cooperadora señalaron que por el momento no denunciarán la situación en la Justicia para que se investigue. Es que los directivos de la cooperadora entienden que en el Ministerio de Educación pueden inspeccionar y pedir explicaciones.

Gabriela, integrante de la Cooperadora explicó ante las cámaras de Canal 13 que los padres se encargan de administrar los recursos de la escuela. “No tiene sentido que paguemos un abogado para iniciar acciones legales.  Si tenemos entes que deben controlar”, aseguró.

De acuerdo al reclamo manifestado, entre las irregularidades que fueron descubriendo, aparece la venta ilícita de la producción de la escuela de fruticultura y ningún registro de la producción de 2019. "Estimamos que más de un millón de pesos estaría faltando porque estamos hablando de la venta de más de mil litros de aceite, a razón de 400 pesos por litro, 1800 litros de vino blanco y 6000 litros de vino tinto, que encima fue pagado por un valor menor", señalaron.

Asimismo expresaron que estos vinos son ganadores de la medalla de Plata en la Cata 2019 y terminaron vendiéndose como vinagre en la vinagrera Ambalí. "Tranquilamente podrían haber sido vendidos por 100 pesos por litro, pero fueron vendidos por 7 pesos", agregó.

Además aclararon que los directivos deben rendir cuentas para que se investigue y que desde la Dirección ofrezcan las respuestas que vienen pidiendo hace rato y aún no la tienen. "Cuando asumimos en octubre de 2019, comenzamos a pedir informes productivos, pero hasta ahora no hemos recibido ninguna contestación. En 2020 empezaron a aparecer acreedores y nuevamente volvimos a pedir informes, pero nunca hubo respuestas", amplió.

Esto ha llegado a un límite porque la escuela está muy deteriorada, al igual que los campos. Somos conscientes que los ingresos que genera la escuela son suficientes para mejorar la escuela y asi poder tener una mejor calidad educativa”, agregó.

El año pasado, Ibaceta contó que acudieron a Educación aunque el subsecretario de Educación Secundaria Técnica les habría recomendado hacer borrón y cuenta nueva para evitar conflictos. "El señor Codorniú nos aconsejó conciliar con la Dirección de la escuela y, como esa no es una respuesta a la altura, es que hicimos pública la situación. No podemos ser cómplices de este mal manejo", concluyó.

Por ello esperan que a partir de esto, desde el Ministerio tomen cartas en el asunto e inicien un sumario administrativo para llegar al fondo de la cuestión, que por el momento promete un escándalo.