Estafas virtuales: crece el número de casos en redes sociales
Por TardeTrece pasó el jefe del D5 de la Policía de San Juan, Ariel Rothis, y habló del tema, de las modalidades y de la manera de cuidarse del “phishing”, una nueva forma de delito informático.
Las redes sociales se han vuelto un lugar inseguro por la cantidad de estafas virtuales que han sucedido en los últimos meses. Personas conocidas de todos los ámbitos han sido víctima del hackeo de sus cuentas personales para intentar estafas a sus contactos con venta de dólares, entre otros. Por TardeTrece pasó el jefe del D5 de la Policía de San Juan, Ariel Rothis, y habló del tema, de las modalidades y de la forma de cuidarse del “phishing”, una nueva forma de delito informático.
“Por ahí uno peca de confiado, en los phishing que se denominan en informática, uno da clic y le abre la puerta al hacker para poder hacerse de nuestros datos”, dijo Rothis y agregó, “las sociedad ocupa las redes sociales y los delitos también están pasando por esta instancia virtual".
Los delincuentes acceder por distintos métodos a cuentas de redes sociales y mensajería instantánea como WhatsApp, Facebook e Instagram. “Se trata de personas que investigan lo que hacemos, lo que nos gusta, lo que compramos, lo que comemos, donde estamos, con quien nos juntamos. Te ofrecen algo fin a lo que te gusta y cuando alguien ingresa a esa publicación engañosa, uno entra pensando que es el local oficial y es la fachada que usan”, explicó.
En posesión de los datos y de las cuentas, se hacen pasar por la victima de la estafa y habla a los conocidos, alegando la pérdida del celular, para hablar desde otro dispositivo. De esta manera ofrecen la venta de dólares o piden un préstamo por alguna emergencia.
“Muchas veces accedemos por parte de un contacto nuestro compartiéndonos información, quizá era falso y entran a tomar tus datos”, dijo e instó a estar atentos.
“Son distintas las metodologías de estas situaciones virtuales delictivas”, declaró, en algunos de los casos cuando hay tranferencia de una compra con CBU, de manera rápida, una vez que se decepciona la denuncia, se pide a las entidades financieras que se traben esas cuentas.
A partir de ahí se piden los datos de transferencia a la agencia bancaria para poder determinar las titularidades de la transacción. “Ante un pedido judicial ellos toman algunas medidas, por lo general ha pasado un tiempo y los fondos transferidas ya no están”, por lo que es crucial actuar con rapidez.
“Hay que denunciar para poder bloquear esa cuenta y tratar de recuperar esos fondos, quizá podamos acceder a los datos pero aprehenderlo es casi imposible porque son de lugares remotos, hasta de fuera del país”, finalizó.