Durante dos días seguidos, el IPV realizó el sorteo de las viviendas que están construyendo en diferentes departamentos. Gracias a eso, más de 530 sanjuaninos cumplieron el sueño de ganar la casa propia. En este contexto, las sanjuaninas Alejandra Varela y Sonia Marconi, comentaron cómo vivieron los sorteos y cuán felices se sintieron al resultar ganadoras. Ambas coincidieron y dijeron que la emoción que tienen es “incomparable”. Hoy y la semana que viene realizarán más sorteos. 

Alejandra y su familia llevaban inscriptos en el IPV 8 años. Ya habían participado de sorteos anteriores, pero según ellos nunca habían sentido tanta seguridad como ahora. “Mi marido no quería escuchar el sorteo y yo le dijo que esta vez sí íbamos a ganar. Después, dejé a mi hijo mayor en la escuela y antes de bajarse me dio la mano y me dijo ‘ojalá ganemos nuestra casa’ y eso pasó”, dijo sin poder disimular la emoción.

"Soy muy devota de la Medalla Milagrosa y el número que me tocó para el sorteo terminaba en 27, que es el día de ella", dijo Alejadra. 

A diferencia de ella, Sonia comentó que estaba consciente de que la podía ganar, pero había dejado todo en manos de la suerte. “No pensé que iba a tener suerte y esta vez me sorprendió”, agregó entre risas y comentó que ella se inscribió en 2013.

Sobre cómo se enteraron que eran ganadoras, las dos dijeron que vivieron situaciones muy extrañas. Alejandra relató que estuvo desde temprano escuchando, pero que después tuvo que cortar la transmisión. Estaba hablando por teléfono con DirecTV y entró el mensaje de una vecina que me preguntaba si éramos nosotros. Cuando vi tenía miles de llamadas perdidas y mensajes. Mi mamá llegó a mi casa, porque mi marido le dijo que fuera a ver si estaba viva”, comentó riéndose de la situación y comentando que después de ese momento siente que vive dentro de un sueño.

Sonia por su parte comentó que ella no sabía el número con el que participaba y que a media mañana decidió poner la transmisión del sorteo, porque estaba ansiosa. El primer apellido que escuchó era el de un señor que comenzaba con M y pensó “que cerca”, el segundo número que salió fue el 199. “Cuando escuché mi nombre no lo podía creer, no podía parar de gritar y celebrar. Estamos muy felices con mi mamá, mi hermana, mi hijo y mi nieto”, dijo y comentó que ella es jubilada y que nunca pensó que en ese momento de la vida podía recibir semejante premio.

"Elegí el barrio de Rawson porque es cerca de donde vive toda mi familia. Ahora tengo que pensar en como va a ser mi vida ahí. Estoy feliz", agregó Sonia. 

“Yo viví momentos emocionantes como los nacimientos de mis hijos, pero esto es incomparable. Todos soñamos con la casa propia. El día que salimos sorteados era todo tan increíble, que fuimos con toda la familia a ver el barrio. A sentir que estamos más cerca de tener nuestro lugar. Para mis hijos es una alegría gigante”, dijo Alejandra que vivirá en el barrio Los Molinos. Mientras que Sonia, que salió sorteada para Valle Grande Norte, agregó: “ahora tengo mi casa, es algo con lo que soñé toda mi vida”.