Durante el fin de semana, se conoció una denuncia presentada en la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) el pasado 30 de mayo de 2024. La denuncia, dirigida al presidente del Consejo Superior, Tadeo Berenguer, fue firmada por Mónica Marianela Segovia Robledo, estudiante de la licenciatura en Ciencias Geológicas de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, y socia del complejo El Palomar. La denunciante habló con el programa Banda Ancha para detallar su acusación.

La denuncia abarca varios aspectos, pero uno de los más destacados señala la presencia de una persona de nacionalidad venezolana ejerciendo medicina de manera irregular. Segovia Robledo afirmó: "Yo soy una persona que asiste muchísimo a El Palomar, soy socia, mi hijo también es socio, y asistimos frecuentemente. Encontré varias irregularidades con una doctora que ejerce allí. Su nombre es Fabiola Durán Quintero, y entrega actas médicas firmadas con el sello de otra médica, la doctora Pilar González. Este sello no le pertenece a Durán Quintero".

Segovia Robledo explicó que Durán Quintero, quien ejerce como médica en El Palomar, utiliza el sello de otra doctora, Pilar González, quien no presta funciones en la universidad. "Firma como médica usando el sello de otra médica que no pertenece a la universidad. Señalé al titular de Bienestar Universitario porque él es el encargado. Inclusive, en un expediente realizado en el año 2022, le otorgaron 4 horas cátedras a Durán Quintero", añadió la denunciante.

La denuncia también menciona que Durán Quintero recibió beneficios adicionales, como alojamiento en El Palomar, donde vivió con su familia durante un año y medio. Además, se le otorgaron cargos universitarios no docentes (PAU) a su marido, y el grupo familiar recibió acceso al comedor, lavandería y becas de estimulación deportiva. "Estamos otorgando un montón de beneficios a personas que no pertenecen a la universidad y que son derechos para los estudiantes", expresó Segovia Robledo.

Cuando se le preguntó sobre sus aspiraciones con la denuncia, Segovia Robledo respondió: "Quiero que haya una investigación interna sobre el uso de los beneficios universitarios". También destacó: "No tengo ninguna motivación de carácter político, simplemente quiero que no existan estas irregularidades. Eso es lo que necesitamos, nada más".

Cabe decir que en la denuncia generada en el Consejo Superior de la Casa de Altos Estudios, aborda tres  puntos. El primero le atribuye a Fabiola Durán Quinteros la presunta comisión de delitos tipificados como ejercicio ilegal de la medicina. La denunciante apunta a que Durán Quintero podría estar ejerciendo la medicina sin la debida habilitación. La segunda hablar de irregularidades en la Administración Universitaria, donde se acusa a Lucas Molina, secretario de Bienestar Universitario; Jorge Riveros, director de Deportes; y Héctor Soria, directora de Atención Universitaria, de posibles delitos de malversación de caudales públicos. El tercero pone en manifiesto la relación de cercanía y uso privado de instalaciones. Es así como la denunciante indica una posible relación cercana entre Durán Quintero y Molina, evidenciada por el hecho de que el secretario de Bienestar Universitario fue testigo en el casamiento de Durán Quintero. Además, acusó a Molina de otorgar el predio y las instalaciones universitarias para beneficios personales, organizando jornadas y torneos ajenos a las actividades de la universidad.

Esta es la denuncia completa que llevó a cabo Segovia Robledo: