Desde el fin de semana comenzó a apreciarse un impactante fenómeno en la provincia de San Juan. Se trata del enorme crecimiento de sintomáticos que acuden al Aldo Cantoni para hisoparse. Esta situación se sostuvo inclusive hasta este miércoles 7 de abril, con filas que superan las dos cuadras.

No cabe duda que el centro de hisopados más visitado de San Juan es el Aldo Cantoni. En este lugar se forman filas interminables de gente con síntomas que acude para ser testeada. Las colas son tan largas que incluso llegaron a doblar por la calle 25 de Mayo, comenzando en el ingreso al estadio por Urquiza.

Cabe destacar que los sanjuaninos que acuden deben presentar dos o más síntomas compatibles con el Covid 19. Antes de poder acceder al test de antígenos, personal de Salud Pública le hace un triage a cada uno. Esto consiste en una corta entrevista en la que los profesionales determinan si esa sintomatología esta vinculada al coronavirus. De esta manera se va desafectando a quienes no cumplen los requisitos para acceder al estudio.

Los síntomas en cuestión son:

  • Fiebre desde 37,5 en adelante.
  • Dolor de garganta.
  • Mucosidad.
  • Pérdida repentina de gusto y olfato.
  • Afección gástrica o estomacal que derive en diarrea.

Una vez que la persona es hisopada, se esperan entre 20 y 30 minutos para obtener el resultado. En el caso de ser positivo el paciente es sometido a una prueba PCR. Este segundo estudio tarda más que el anterior, por lo que ese sanjuanino o sanjuanina deberá aislarse inmediatamente en su vivienda hasta tener la confirmación.

De arrojar un nuevo positivo los profesionales comienzan una investigación para determinar quienes son los contactos estrechos del infectado. Se trata de quienes hayan permanecido más de 15 minutos con la persona, a menos de 2 metros de distancia y sin usar barbijo. Quienes cumplan estas características también deberán confinarse.

Finalmente es importante mencionar que ningún adolescente menor de 15 años será hisopado. Si el chico tiene entre 15 y 17 años de edad deberá acudir con un adulto que conviva con él para certificar los síntomas. Únicamente de esa manera el personal atenderá al joven.